Respuestas
Respuesta:
Un labrador muy pobre estaba arando su campo cuando de pronto, su
arado de madera se quebró al chocar con un objeto duro. Era un enorme
cazo. Se lo llevó con él para recompensar la averia. Al llegar a su casa, su
esposa lo insulto por el accidente.
El labrador iba contando dinero, tropezó con el cazo y las monedas
cayeron dentro de él Al inclinarse para recogerlas vio que estaban mul-
tiplicadas y, al sacarlas, otras monedas iguales estaban dentro. Se dio
cuenta de que el cazo era mágico.
Un vacino se entero del hallazgo del labrador y lo acusó ante un juez
de haber encontrado el cazo en su terreno. El juez les pidió que explicaran
el asunto y, al enterarse de la virtud del cazo, decidió confiscarlo para
quedarse con él. El labrador y su vecino le platicaron a toda la gente la
actitud codiciosa del juez
El padre del juez oyó lo que de su hijo se decía y fue a reprenderlo.
El juez le dijo: "Pero es que no se trata de un cazo común. Ven y te lo
mostrare". En cuanto el padre escuchó lo que hacía el cazo mágico, metió
en el monedas y estuvo sacándolas y metiéndolas con una avidez incon-
tenible. Después de mucho tiempo de meter y sacar monedas se inclinó
tanto que cayó en el cazo. El juez fue en ayuda de su padre y lo saco, pero
otro padre idéntico ya estaba ahí quejándose y pidiéndole que lo sacara.
El juez estuvo sacando padres y padres toda su vida, a quienes tenía
que rendir tributo para no faltar a sus deberes filiales.
Explicación: