nombra, por lo menos a 4 actores sociales que fueron participantes del proceso revolucionario de america del sur, detallando sus ideales, objetivos y logros
Respuestas
1. El capitalismo y las ideas liberales
Desde fines del siglo XV, los comerciantes europeos comenzaron a tener cada vez más prosperidad económica. La mentalidad capitalista, basada en el lucro, el progreso y el comercio libre, fue la motivación principal para la ocupación europea en América, África y Asia. Aunque España y Portugal fueron pioneras en la colonización de otros continentes, las naciones que comenzaron a dominar el comercio y a impulsar la industria doméstica fueron principalmente Holanda, Inglaterra y Francia. El escritor uruguayo Eduardo Galeano cuenta la siguiente historia sobre la reina Isabel I de Inglaterra:
2. El deterioro de los imperios ibéricos
En el siglo XVIII, España y Portugal ya no eran ricos imperios. El oro y los metales preciosos que trajeron de América fueron utilizados para consumir los productos industriales de otras regiones europeas y no para desarrollar la industria local. De este modo, la economía doméstica todavía era fundamentalmente agraria, cuando la industria inglesa ya florecía en las áreas textil y metalúrgica (hierro y acero). Ambos reinos tenían inmensas deudas con banqueros de Inglaterra, Francia y otros países europeos, lo cual afectaba su política interna y externa. Además, el gobierno despótico, el crecimiento de la población y la influencia de las ideas liberales causaron gran inestabilidad social.
3. Las luchas por la independencia
A comienzos del siglo XIX, las tensiones políticas en los territorios españoles de América eran explosivas. Era evidente la rivalidad entre los criollos y los peninsulares que representaban a la Corona en América (llamados despectivamente"chapetones" o "gachupines"). Las desigualdades e injusticias de las sociedades americanas también exacerbaron las tensiones sociales. En consecuencia, el triunfo de la Revolución Francesa y el nuevo gobierno de Napoleón Bonaparte detonaron, sin quererlo y por caminos divergentes, los procesos de independencia en Haití, Brasil y el continente hispanoamericano.
4.La violencia
Los desastres de la violencia no terminaron en 1824. Guerras de separación entre las nuevas naciones, conflictos entre partidos políticos e intereses locales, y grupos de mestizos que reclamaban privilegios gracias a su nuevo estatus militar, fueron la constante causa de violencia e inestabilidad política durante casi todo el siglo XIX en Hispanoamérica. Las fricciones entre liberales (comerciantes) y conservadores (hacendados) eran comunes, las regiones rivalizaban por el dominio del gobierno central y, en suma, los conflictos sociales de la colonia permanecieron sin solución, creando un ambiente social volátil. Los cuatro virreinatos españoles se transformaron, en pocas décadas, en dieciocho países soberanos, y muchos de ellos con repetidas guerras civiles. No es sorprendente que, poco antes de morir en 1830 y después de ver la división de su anhelada Gran Colombia en tres países diferentes, Simón Bolívar afirmara: "América es ingobernable. Los que hemos servido a la revolución hemos arado en el mar" (Winn 83).