Respuestas
El racionalismo renacentista preconizaba la representación unitaria y coherente del espacio y de las proporciones, de tal manera que lo representado fuera abarcable en toda su complejidad como un único motivo bien trabado e inteligible. La cartografía no podía ser ajena a esta pretensión de concordancia lógica entre las partes y el todo. En adelante serán la ciencia, el cálculo y la composición matemática las que marcará el ritmo de las nuevas producciones cartográficas.
Colón, convencido como estaba de que la circunferencia de la tierra medía aproximadamente los 30.000 km que Ptolomeo preconizaba, y no los 40.000 que medía en realidad, consiguió, no sin dificultad, convencer a los Reyes Católicos de acometer la empresa de llegar a las Indias orientales navegando hacia occidente. Sus intentos por lograr la financiación necesaria para esta empresa habían sido infructíferos en otras cortes, sin embargo, como los navegantes españoles, en virtud del tratado de Alcaçovas, no podían navegar por debajo de las Islas Canarias, la única posibilidad para la monarquía hispánica de comerciar con Oriente era la que el Almirante proponía. Isabel de Castilla, que poco tenía que perder y mucho que ganar, tomó personalmente la decisión de patrocinar parte de la expedición. Comerciantes privados financiaron el resto. Se habilitaron tres pequeños navíos y con este bagaje y una tripulación experta de unos noventa hombres, la expedición se hizo a la mar.
En aquel momento, estaban sucediendo en todos los ámbitos de la vida y del conocimiento cambios vertiginosos que afectarían radicalente a las ciencias, a la tecnología, al conocimiento de la tierra y, lógicamente, a la cartografía.
Durante la primera mitad del siglo XVI, la tierra dobló literalmente de tamaño. El descubrimiento de América, la circunvalación de la tierra, las largas expediciones de los navegantes portugueses, la necesidad de representar las nuevas rutas y dar a conocer las peculiaridades de las tierras descubiertas, la generalizació
Respuesta:
El racionalismo renacentista preconizaba la representación unitaria y coherente del espacio y de las proporciones, de tal manera que lo representado fuera abarcable en toda su complejidad como un único motivo bien trabado e inteligible. La cartografía no podía ser ajena a esta pretensión de concordancia lógica entre las partes y el todo. En adelante serán la ciencia, el cálculo y la composición matemática las que marcará el ritmo de las nuevas producciones cartográficas.
Colón, convencido como estaba de que la circunferencia de la tierra medía aproximadamente los 30.000 km que Ptolomeo preconizaba, y no los 40.000 que medía en realidad, consiguió, no sin dificultad, convencer a los Reyes Católicos de acometer la empresa de llegar a las Indias orientales navegando hacia occidente. Sus intentos por lograr la financiación necesaria para esta empresa habían sido infructíferos en otras cortes, sin embargo, como los navegantes españoles, en virtud del tratado de Alcaçovas, no podían navegar por debajo de las Islas Canarias, la única posibilidad para la monarquía hispánica de comerciar con Oriente era la que el Almirante proponía. Isabel de Castilla, que poco tenía que perder y mucho que ganar, tomó personalmente la decisión de patrocinar parte de la expedición. Comerciantes privados financiaron el resto. Se habilitaron tres pequeños navíos y con este bagaje y una tripulación experta de unos noventa hombres, la expedición se hizo a la mar.
En aquel momento, estaban sucediendo en todos los ámbitos de la vida y del conocimiento cambios vertiginosos que afectarían radicalente a las ciencias, a la tecnología, al conocimiento de la tierra y, lógicamente, a la cartografía.
Durante la primera mitad del siglo XVI, la tierra dobló literalmente de tamaño. El descubrimiento de América, la circunvalación de la tierra, las largas expediciones de los navegantes portugueses, la necesidad de representar las nuevas rutas y dar a conocer las peculiaridades de las tierras descubiertas, la generalizació
Explicación: ESPERO HABERTE AYUDADO