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Título: “Una crónica del 2020 para seguir construyéndonos como país”
INICIO:
El 2020 ha sido un año que ha cambiado nuestra vida por completo. Nuestro país y el mundo entero se han apartado considerablemente de lo que resultaba ser una vida “normal” para nosotros. La Covid 19, ha transformado la normalidad para muchos de nosotros en los últimos tiempos, pero también ha sido una etapa de reflexión acerca del comportamiento que tenemos cada uno de nosotros para el desarrollo de nuestro país.
DESARROLLO:
Una pregunta que genera reflexión en mi situación es “¿Cómo la pandemia cambio mi vida?” Absolutamente todos nos hemos visto afectados por la pandemia, personalmente en mi vida y la de mi familia la pandemia nos hizo reflexionar sobre nuestro comportamiento con relación al cumplimiento de normas para asumir compromisos que contribuyen al desarrollo de nuestra propia familia, además, de la comunidad y del todo el país.
Hay una frase que me gusto y que en verdad me hizo reflexionar y fue escrito por un francés Louis Antoine Caracciolí y dice:
“Nada hay más admirable y heroico, que sacar valor del seno mismo de las desgracias, y revivir con cada golpe que debería darnos la muerte”
A comienzos del mes de Marzo, eran días emocionantes por volver al colegio ver a mis compañeros, pero lamentablemente la pandemia me cerró las puertas para realizar lo que más quería. La pandemia desde ese entonces se ha convertido en unos de los retos más fuertes que he atravesado en mi vida.
La pandemia obligo a nosotros los estudiantes y a los profesores a adaptarse, de la noche a la mañana, a las clases online, cambiando nuestros habituales pupitres y pizarras por pantalla de ordenador y convirtiendo a la tecnología en el mejor aliado para continuar con nuestras formaciones académicas durante el tiempo de confinamiento.
Significativamente este proceso se ha venido convirtiendo en todo un reto para los profesores y estudiantes.
CIERRE:
Fuera de todos los conocimientos que ocurrieron durante la pandemia la crisis sanitaria nos está poniendo delante un espejo, para mostrar lo mejor y lo peor de la gente. La pandemia ha ayudado a muchos a priorizar lo importante, que siempre son las mismas personas. Pero a la vez, se ha acentuado el egoísmo, frente a las redes de apoyos vecinales, traslados solitarios de los pacientes o la colaboración de las empresas poniendo todas sus capacidades al servicio de las campañas solidarias.
La pandemia pasara y a nuestro país seguirá avanzando. Pero de las decisiones que tomemos hoy, como ciudadanos y ciudadanas, dependerán los resultados que se verán en nuestro país en los próximos años.