Respuestas
Una familia formada por padre, madre e hijo, va a celebrar la Nochebuena de un modo especial: por primera vez, llevarán al niño de viaje galáctico. Si embargo, pronto empiezan los problemas, pues los oficiales interplanetarios, que vendrían a ser los agentes de aduanas del futuro, les impiden subir al cohete los regalos y el árbol de navidad, por exceso de peso.
Lejos de desmoralizarse por la pérdida de estos objetos imprescindibles para la celebración, el padre mantiene el espíritu navideño e idea un plan para que esta Navidad resulte inolvidable para su familia. Decide conducirlos a una cabina con un amplísimo ojo de buey para, sumidos en el misterio de la oscuridad y el espacio, observar la belleza infinita del universo y de las galaxias, mientras que otros tripulantes cantan villancicos.
La última frase del texto es una hermosa metáfora: "el resplandor de cien mil millones de maravillosas velas blancas", que son las estrellas.
La enseñanza del cuento nos recuerda a la obra clásica homónima de Dickens, lo material carece de importancia, lo realmente valioso son los sentimientos, compartir estos momentos inolvidables con los seres queridos
Espero que te sirva...