Respuestas
Respuesta:
Portada: Es la primera cara que percibe el público. Es imprescindible incluir un eslogan llamativo, así como elementos que identifiquen a la marca de un solo vistazo, tales como el logotipo o los colores corporativos. De la portada depende que se capte la atención o no del público.
Contraportada: Es la parte última del díptico. A diferencia de la portada, la contraportada debe centrarse en información específica de la propia empresa como datos de contacto, dirección, etc. En este caso es más importante la claridad de la información que cualquier otro elemento, una persona que llega a la contraportada ya ha sido impactada.
Parte central: Se compone por las dos caras interiores del díptico publicitario. En este espacio debemos especificar las características del producto o servicio que estamos vendiendo. Dispón la información de manera clara y ordenada, no sobrecargues las caras interiores con un exceso de mensajes, de lo contrario la atención captada por la portada no servirá para nada.
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Portada: Es la primera cara que percibe el público. Es imprescindible incluir un eslogan llamativo, así como elementos que identifiquen a la marca de un solo vistazo, tales como el logotipo o los colores corporativos. De la portada depende que se capte la atención o no del público.
Contraportada: Es la parte última del díptico. A diferencia de la portada, la contraportada debe centrarse en información específica de la propia empresa como datos de contacto, dirección, etc. En este caso es más importante la claridad de la información que cualquier otro elemento, una persona que llega a la contraportada ya ha sido impactada.
Parte central: Se compone por las dos caras interiores del díptico publicitario. En este espacio debemos especificar las características del producto o servicio que estamos vendiendo. Dispón la información de manera clara y ordenada, no sobrecargues las caras interiores con un exceso de mensajes, de lo contrario la atención captada por la portada no servirá para nada.
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