¿a que llamamos alimentacion sostenible y por que es tan importante para realizarla en nuestra epoca?
Respuestas
Es un modelo de alimentación que tiene como objetivo afrontar las preocupaciones de salud y ambientales asociadas a la producción y consumo de alimentos. Para ello, además de garantizar la salud de las personas, busca promover la producción y consumo responsables, genera un impacto ambiental reducido, lucha contra el cambio climático, respeta la cultura, la biodiversidad y protege los ecosistemas terrestres y la vida submarina.
Este tipo de alimentación, alineado con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de las Naciones Unidas, es responsable, sostenible y ético, tanto a nivel local como global con el entorno y con el resto de seres vivos del planeta.
La alimentación sostenible también tiene en cuenta la huella ambiental de la alimentación, es decir, la emisión de gases, el consumo de energía y el uso de recursos hídricos así como de la tierra durante todo el proceso de la cadena alimentaria. Además de priorizar alimentos poco procesados, locales y de temporada y potenciar actividades culinarias y gastronómicas.
Para el Director de la Cátedra UNESCO de Alimentación, Cultura y Desarrollo de la UOC, “en la alimentación sostenible, es fundamental que la producción de los alimentos sea culturalmente coherente y no tenga una repercusión ambiental considerable”.
Por ello, para contribuir al logro de la ODS y el acuerdo de clima de París es esencial que los sistemas alimentarios sean “A prueba de futuro”, es decir, resistentes, sostenibles, responsables, diversos, competitivos e inclusivos. También es muy relevante la elección de una dieta sostenible, una alimentación que respete el medioambiente.
¿Qué podemos hacer como consumidores para que nuestra alimentación sea más sostenible y saludable?
Cuando atañe a la comida, una pregunta destaca siempre: ¿qué es la alimentación saludable? La respuesta a esta, junto a una alianza hacia la sostenibilidad del medio ambiente, da estos puntos a tener en cuenta en una dieta sostenible:
- Comer menos carnes rojas y procesadas.
- Consumir más productos locales, de temporada y mínimamente procesados.
- Aumentar el consumo de leguminosas y de frutos secos como fuente de proteína vegetal.
- Incrementar el consumo de frutas y hortalizas.
- Tomar más cereales y alimentos ricos en almidón.
- Mantener el consumo de lácteos.
- Planificar las comidas o aprovechar las sobras contribuye al cambio para evitar el despilfarro.
Por lo tanto, apostar por una alimentación saludable y sostenible es invertir en salud. Es importante promover una alimentación suficiente, completa, equilibrada, satisfactoria, segura, adaptada al comensal, al entorno, sostenible y asequible. Y en definitiva, trabajar para transformación global del sistema alimentario.