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La Idea de Desarrollo Sostenible causo gran interés y la preocupación de todos en la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Medio Ambiente y Desarrollo, celebrada en Río de Janeiro en 1992, y desde ese entonces ha cobrado cada vez más relevancia.
En este contexto, el año 2000 nace el Pacto Global de la ONU, como la primera organización internacional abocada a examinar los temas críticos relacionados con la sostenibilidad, en relación al mundo privado.
Las empresas que adhieren al Pacto Global asumen un serio compromiso de integrar el concepto de sostenibilidad en su estrategia corporativa, mediante la implementación de 10 Principios, los cuales están centrados en cuatro ámbitos: derechos humanos, relaciones laborales, medio ambiente y anticorrupción.
En ese sentido, cada país prioriza sus áreas de trabajo, en función de la agenda mundial, hoy establecida en la Agenda 2030 junto a los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible.
Pero con impulsar el trabajo de los 17 Objetivos Sostenibles dentro de las empresas no basta, para lograr el real cambio se necesita una gran conciencia sostenible en la sociedad, es por esto que Pacto Global Chile te quiere entregar 6 consejos para implementar estos objetivos a tu vida diaria:
Compras: sé un comprador inteligente. Prioriza la compra de productos que estén hechos de materiales naturales o reciclables, y que tengan una gran vida útil. Evita por ejemplo botellas y bolsas plásticas que no se puedan reutilizar. Comprar a granel es una buena forma de reducir residuos, evita el consumo excesivo. Por ultimo escoge empresas que implementen en su estrategia corporativa la Sostenibilidad como elemento clave.
Energía: aprende a leer las etiquetas de tus electrodomésticos, esta te permite conocer la eficiencia energética del aparato, así puedes saber cuál consume menos (se clasifican desde G, menos eficiente, a la A, más eficiente). Invierte en ampolletas de bajo consumo y, si tienes acceso, implementa en tu casa el uso de energías renovables como la solar.
Ahorro: comprar de segunda mano o intercambiar productos es una buena forma de ahorrar pero también de contribuir a mundo más sostenible. Prioriza los productos que estén más cerca. Al comprar productos locales no sólo beneficias a la economía de la zona, generando empleo y riqueza en el territorio, sino que además reduces el consumo de energía y evitas gastar en transporte. Repara lo que sea posible, evita comprar más.
Transporte: prefiere siempre trasladarte caminado o en bicicleta, así no contaminas y contribuyes a tu salud. Prefiere el transporte público o coordina con tus vecinos para siempre trasportarte en un auto con más personas, esto significará un ahorro para la familia pero también un gran alivio para el medio ambiente. Si quieres comprar un auto prefiere aquellos que contaminen menos.
Agua: elemento primordial para la vida, no la malgastes. Duchas más cortas, regar de noche, cerrar el grifo mientas lavas los platos o te cepillas los dientes, son algunos consejos para optimizar su uso.
Recicla o reutiliza: Usa tu imaginación y crea algo para decorar o regalar, si no quieres hacer esto, separa los residuos y tíralos en contenedores adecuados, con este gesto no solo reduces la generación de residuos y la extracción de nuevas materias primas, sino que además contribuyes a la generación de puestos de trabajo y a la generación de una economía del reciclaje
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