Respuestas
Respuesta:
· Son persistentes:
Es decir, muy resistentes a los procesos de degradación natural y permanecen en el medio ambiente.
Nuestra salud está íntimamente ligada a la salud del planeta, no puede haber seres vivos saludables en un planeta enfermo.
· Son bioacumulativas:
Es decir que se acumulan en los tejidos adiposos de los animales y en los nuestros propios, pasando a nuestra cadena alimenticia.
· Desconocemos los efectos cruzados:
Si tenemos poca información de los efectos nocivos causados por las sustancias químicas tóxicas, menos información tenemos aún de los efectos cruzados de estas sustancias, es decir, cuando en un producto hay una mezcla de varias de ellas.
· Son mutágenas:
Aumentan el riesgo de contraer cáncer o producir alteraciones genéticas de las células.
· Son disruptores endocrinos:
Son “sustancias químicas que tienen efectos adversos para la salud de un organismo o para su descendencia como consecuencia de cambios en la función endocrina”. No son mutagénicos, no son carcinogénicos, por lo que escapan a los controles toxicológicos.
Los estrógenos naturales no atraviesan la barrera placentaria, porque la evolución ha sabido protegernos, pero hemos inventado sustancias artificales como el bisfenol con efectos estrogénicos y que sí son capaces de atravesar esa barrera.
Son responsable por ejemplo de la criptorquidia que consiste en que en el momento del nacimiento el bebé no presenta los testículos en las bolsas escrotales. Es una de las consecuencias de la sobreexposición a estrógenos ambientales durante la gestación.
El Dr. Nicolás Olea, Catedrático de la Universidad de Granada nos contó en una de nuestras Jornadas los efectos de estas sustancias.
· Son neurotóxicas:
Es decir causan daño al cerebro o al sistema nervioso periférico causado por la exposición a estas substancias tóxicas que pueden alterar la actividad del sistema nervioso incluso romper o matar a los nervios. Los nervios son esenciales para la información en el cerebro, así como las otras áreas que transmiten y de tramitación del sistema nervioso.
· Son biocidas:
Hay sustancias químicas usadas en agricultura que están diseñadas para matar como los plaguicidas insecticidas y pesticidas. Es ingenuo pensar que estas sustancias se van a quedar solamente en el insecto con el que queremos acabar y no van a penetrar en el suelo, en la tierra, en los acuíferos internos y no van a permanecer en las plantas que se convertirán en materias para fibras alimentos, etc…
Solo el 3% de la tierra cultivable a nivel global está plantada con algodón convencional, y este cultivo cuando se realiza de manera habitual, es decir, no orgánica, utiliza el 25% de plaguicidas y el 11% de insecticidas a nivel global.
Mientras que otros temas se han tratado mucho dentro del sector de la moda sostenible, el tema de las sustancias químicas tóxicas, quizás por su complejidad, es algo que queda un poco al margen; incluso ahora que se habla tanto de aplicar la economía circular a la moda, está muy bien reciclar prendas y obtener materias nuevas pero esto es solo una solución a medio plazo ya que esas fibras siguen contaminadas con estas sustancias, deberíamos de ser más exigentes y buscar soluciones que realmente sean apuestas de un futuro próspero en todos los sentidos.
Explicación: