AYUDA ES PARA HOY
1.El realismo mágico, en la narrativa de García Márquez se sustenta en *
La mitología clásica
La ficción pura
La mitología griega
La hiperbolización
ES LITERATURA
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Respuesta:
primera persona en utilizar el término “realismo mágico” y quien acuñó el término fue el crítico de arte e historiador alemán Franz Roh (1890 – 1965) en 1925, llamándole “Magischer Realismus”, para referirse a un estilo pictórico conocido como “Neue Sachlichkeit” (la Nueva Objetividad), una alternativa al expresionismo.
En ese momento, Roh identificó los detalles precisos del realismo mágico: la claridad fotográfica fluida y el retrato de la naturaleza “mágica” del mundo racional.
Roh creía que el realismo mágico estaba relacionado con el surrealismo, pero siendo un movimiento distinto debido al enfoque del realismo mágico en el objeto material y la existencia real de las cosas en el mundo.
Ese mismo año (1925), Fernando Vela, escritor en “Revista de Occidente” fundada por José Ortega y Gasset en 1923 y de quien Vela era discípulo, tradujo y publicó en esa revista el ensayo de Roh al español, preparando el escenario para su apropiación por parte del movimiento literario.
Inicios del realismo mágico: la pintura
Roth era crítico de arte y acuñó el término para esa disciplina en una exposición comisariada por Gustav Hartlaub (quien respaldó la propuesta) y quien la bautizó precisamente “Neue Sachlichkeit”.
Si bien el estilo pictórico comenzó a evolucionar a principios del siglo XX, fue el italiano Massimo Bontempelli quien adaptó y expandió el término a las comunidades tanto de Alemania como de Italia.
Giorgio de Chirico , Love Song 1914, Museo de Arte Moderno.
El artista italiano Giorgio de Chirico es considerado el pionero cuando a finales de la década de 1910 produce obras bajo el estilo de “arte metafísico”.
A partir de ese momento y principalmente en Estados Unidos, el realismo mágico en pintura comienza a desarrollarse y expandirse aún más con autores destacados entre 1930 y 1950 como Bettina Shaw-Lawrence, Paul Cadmus, Ivan Albright, Philip Evergood, George Tooker, Rico y Andrew Wyeth.
Todos ellos aplican claramente la definición que Roth dio al realismo mágico:
El realismo mágico en la Literatura Latinoamericana
El realismo mágico literario surgió en América Latina. A comienzos del siglo XX, era muy común que los escritores viajaran frecuentemente a los centros culturales europeos como Berlín, París o Madrid, y fueron influenciados por el movimiento artístico de la época.
Los escritores Alejo Carpentier o Arturo Uslar-Pietri, por ejemplo, fueron fuertemente influenciados por movimientos como el surrealismo durante sus estadías en París entre 192 y 1930.
Sin embargo, la publicación de la traducción de Roh en la Revista de Occidente, encabezada por la figura literaria de Ortega y Gasset, fue el disparador de la vinculación de los realismos mágicos pictóricos y literarios.
Jorge Luis Borges inspiró y alentó a otros escritores latinoamericanos en el desarrollo de este nuevo género,
Jorge Luis Borges
particularmente en su primera publicación del realismo mágico “Historia Universal de la Infamia”, en 1935.
Entre 1940 y 1950, el realismo mágico latinoamericano alcanzó su apogeo con una gran cantidad de escritores principalmente argentinos.
Visión del mundo occidental y del mundo nativo
La perspectiva crítica hacia el realismo mágico como un conflicto entre la realidad y la anormalidad proviene de la disociación del lector occidental con la mitología, una raíz del realismo mágico que las culturas no occidentales comprenden con más facilidad.
La confusión en occidente se debe a la concepción de lo real creada en un texto realista mágico. En lugar de explicar la realidad utilizando las leyes naturales o físicas, este género crea una realidad en la cual la relación entre los incidentes, los personajes y el entorno no puede basarse o justificarse por su estatus dentro del mundo físico.
Para comprenderlo, nos puede ayudar el análisis que realizó el escritor guatemalteco William Spindler en su artículo “Realismo mágico: una tipología”, que si bien tiene ciertas objeciones por parte de críticos, fue un acto de intentar categorizar el realismo mágico.
Spindler sostiene que hay tres tipos de realismo mágico, aunque no son de ninguna manera incompatibles entre ellos:
“Metafísico” europeo: con su sentido de extrañeza y lo extraño, ejemplificado por la ficción de Kafka.
“Ontológico”: caracterizado por “seriedad” al relacionar eventos inexplicables
“Antropológico”: en donde una cosmovisión nativa se une a la cosmovisión racional occidental.
Si bien hay muchas críticas sobre que América Latina sea la piedra angular de todas las obras del realismo mágico, es indudable que es en este continente en el que se aprovechó y expandió al máximo, ofreciendo al mundo una gran cantidad de autores