Respuestas
Respuesta:
Explicación:
Factores físicos como condicionantes
del sector primario.
Los principales condicionantes físicos de la agricultura son el clima, el relieve y
el suelo. La influencia de los factores físicos sobre el paisaje agrario es mayor a medida
que los grupos humanos son más primitivos y disponen, por tanto, de técnicas más
rudimentarias.
Clima
Es el factor natural que tiene mayor influencia en el desarrollo y la distribución
espacial de los cultivos. Cuatro son los factores climáticos de base que limitan la
actividad agrícola:
• El frío, porque en general las plantas y, por tanto, los cultivos, no
pueden desarrollarse con temperaturas bajo cero; la mayoría, incluso, deja de
crecer por debajo de los 10 °C.
• El calor, pues son escasas las plantas y, en consecuencia, los cultivos
que se desarrollan a más de 45 °C.
• La aridez, ya que tanto las plantas como los cultivos exigen una cierta
cantidad de agua distribuida según sus necesidades a lo largo de su ciclo
vegetativo.
• La humedad elevada, pues las lluvias abundantes y constantes
favorecen el crecimiento de las malas hierbas.
Por eso, en las regiones polares, los desiertos y las selvas, es casi imposible
practicar la agricultura a no ser que se apliquen grandes medios técnicos. Por otra parte,
cada planta necesita una determinada temperatura y humedad; por ello, el ser humano
ha ido adaptando a lo largo de la historia las especies más adecuadas para cada tipo de
clima.
Relieve
La agricultura se desarrolla mejor en las llanuras y los valles. Esto se debe a dos
motivos:
• La pendiente del terreno, que impide cultivar en tierras con una
inclinación superior a los 10°.
• El descenso de las temperaturas a medida que aumenta la altitud (por
término medio, un grado por cada 180 m). El límite para cualquier cultivo se
sitúa en torno a los 4.300-4.600 metros.
Suelo
Por su textura, los suelos son ligeros y pobres si en ellos predominan las arenas.
Los suelos arcillosos son pesados y retienen bien la humedad, pero son difíciles de
trabajar y han de estar bien drenados. Los mejores suelos son aquellos en los que
abundan los limos.
Por su composición química, los suelos pueden ser ácidos o básicos. Los ácidos
suelen ser más pobres.