Transforma estos adjetivos y verbos en sustantivos agregando -ancia o -encia a cada palabra:
vigilar
ocurrir
frecuente
ganar
tolerar
paciente
Respuestas
Respuesta:
En la desesperación de ver el mundo he querido detener el tiempo de la niñez. Sí, al verlos
amontonados en alguna esquina, en esas conversaciones herméticas que para los grandes
no tienen ninguna importancia, he sentido la
necesidad de paralizar el curso del tiempo.
Dejar a esos niños para siempre ahí, en esa
vereda, en ese universo hechizado. No permitir que las suciedades del mundo adulto los
lastimen, los quiebren. La idea es terrible,
sería como matar la vida, pero muchas veces me he preguntado en cuánto contribuye
la educación a adulterar el alma de los niños.
Hay que advertirles a los chicos del peligro
planetario de las atrocidades que las guerras
han provocado en los pueblos. Es importante
que se sientan parte de una historia a través
de la cual los seres humanos han hecho grandes esfuerzos y también han cometido grandes errores.
La búsqueda de una vida más humana debe
comenzar por la educación. Por eso es grave
que los niños pasen horas atontados delante
de la televisión, asimilando todo tipo de violencias; o dedicados a esos juegos que premian la destrucción. El niño puede aprender
a valorar lo que es bueno y no caer en lo que
es inducido por el ambiente y los medios de
comunicación. No podemos seguir leyéndoles a los niños cuentos de gallinas y pollitos
cuando tenemos a esas aves sometidas al
peor suplicio. No podemos engañarlos en lo
que se refiere a la irracionalidad del consumo,
a la injusticia social, a la miseria evitable, y a
la violencia que existe en las ciudades y entre
las culturas. Con poco que se les explique, los
niños comprenderán que se vive un grave pecado de despilfarro en el mundo.
Gandhi llama a la formación espiritual, la educación del corazón, el despertar del alma, y
es crucial que comprendamos que la primera
huella que la escuela y la televisión imprimen
en el alma del chico es la competencia, la victoria sobre sus compañeros, y el más enfático
individualismo, ser el primero, el ganador. Creo
que la educación que damos a los hijos procrea
el mal porque lo enseña como bien: la piedra
angular de nuestra educación se asienta sobre
Explicación:
Respuesta:
vigilancia, ocurrencia, frecuencia, ganancia, tolerancia, paciencia
Explicación: