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Evolución de la demanda de fertilizantes en la campaña agrícola 2017/2018
Durante la campaña 2017/18 el consumo de fertilizantes ha aumentado respecto a las cifras del periodo anterior. El consumo global subió un 3,8%, alcanzando la cifra de 5,1 millones de toneladas. El consumo de nitrógeno aumentó un 5%, 8% el de fósforo y, por el contrario, se redujo el consumo de potasio, casi un 8%.
La campaña agrícola y la aplicación de fertilizantes han estado condicionados, entre otras, por las siguientes circunstancias:
La siembra y la fertilización de los cultivos de otoño e invierno de 2017 se llevó a cabo en condiciones de sequía, de manera intermitente y con aplicaciones de fondo inferiores a las habituales. Finalmente, la superficie sembrada fue idéntica a la de la campaña anterior.
A partir del mes de enero de 2018 las precipitaciones fueron superiores a las históricas hasta la finalización del año fertilizante. La mejora significativa de los cultivos por las lluvias y las expectativas de buenas producciones mejoraron muy sensiblemente la aplicación de fertilizantes propiciando una buena cobertera en cultivos extensivos.
Los regadíos se sembraron sin ninguna restricción de agua para riego y tan solo condicionada, en cuanto a superficies, por las tendencias del mercado y los bajos precios a los que cotizaba, por ejemplo, el maíz. Este cultivo ha vuelto a registrar una nueva reducción en superficie.
Las producciones de cereales han sido extraordinarias, 57% superiores a las del anterior año agrícola. También han sido buenos los rendimientos en el resto de los cultivos herbáceos, especialmente la colza.
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