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Respuesta:
Hacía ya algún tiempo que no hablábamos de motores. Probablemente recordaréis que ya hemos tocado muchos palos en relación a este tema, tratando frecuentemente las curiosidades de los motores de combustión interna, de motores eléctricos en alguna ocasión e incluso esporádicamente de los motores de combustión externa.
Sin embargo, nos faltaba un tipo de mecánica muy básica: los motores de dos tiempos, también conocidos popularmente como motores de ciclos. No son ninguna novedad en el mercado, pero hoy quiero dedicarle unas cuantas líneas a explicar qué son, cómo funcionan, cuáles son sus principales diferencias respecto a los motores de cuatro tiempos y cuáles son sus ventajas y desventajas.
Explicación:
Qué es un motor de dos tiempos
Cuando hablamos de un motor de dos tiempos, hacemos referencia a un motor de combustión interna que lleva a cabo las cuatro fases del ciclo termodinámico -admisión, compresión, explosión y escape- en sólo dos movimientos lineales del pistón (uno de subida y otro de bajada), es decir, se produce una explosión por cada vuelta que el pistón realiza al cigüeñal.
Si bien es cierto que son más económicos, también son menos ecológicos que los motores de cuatro tiempos, por lo que en la actualidad los encontramos sólo en aquellos ciclomotores con potencia reducida y en determinados modelos de enduro o motocross -si hablamos de vehículos-. Existen tanto en ciclo Otto como en ciclo diésel.