Respuestas
Respuesta:
Explicación:
Los procesos de la Inquisición constaban de varias etapas:
La detención: El acusado era detenido sin haberle comunicado previamente las razones por la cual se le privaba de su libertad.
La amonestación: En primera instancia, al acusado se le llamaba la atención con la finalidad de que confesara su delito por iniciativa propia.
La tortura: Si el acusado no confesaba su falta voluntariamente, entonces se procedía a torturarlo a través de mecanismos como los azotes, el potro y las brasas.
La sentencia: Luego de varias audiencias, en las que se exponían los alegatos de la acusación y la defensa, se pronunciaba la sentencia final del caso.
Autos de fe de la Inquisición
Eran las ceremonias en las que se anunciaban las penas impuestas, eran consideradas por el Santo Oficio como una penitencia. Si la falta era leve, el condenado participaba en un auto de fe privado. Los autos de fe públicos estaban reservados solo a los delitos graves y solían llevarse a cabo un día domingo en la plaza principal de la ciudad para que el público pudiera asistir. Los autos de fe eran ceremonias que se caracterizaban por la pompa y la solemnidad de cualquier acto público al que asistían las autoridades más representativas.
Penas y delitos
Eran variadas según la gravedad de la falta. Muchas de ellas eran pecuniarias y otras penas mayores incluían la prisión y el destierro. La más grave era la pena de muerte.
En cuanto a las cárceles de la Inquisición, en estas se les brindaba a los reos un trato mejor que en las cárceles ordinarias, tanto así, que quienes se hallaban recluidos en cárceles ordinarias trataban de imputarse delitos religiosos para poder ser trasladados a las celdas de la Inquisición.
El delito más frecuentemente procesado por el Santo Oficio fue el de las “proposiciones”, que era el nombre que se les daba a las opiniones vertidas públicamente en contra del dogma y la moral católicos. También eran frecuentes los casos de blasfemia, judaísmo y bigamia. En menor medida, casos de hechicería.
En el Perú, la Inquisición aplicó la pena de muerte a 30 personas, que es el equivalente al 2.4% del total de procesados en sus 250 años de existencia.
Apogeo y fin de la Inquisición en el Perú
La época de mayor actividad del Tribunal del Santo Oficio, se dio entre las décadas finales del siglo XVI y todo el siglo XVII y decayó considerablemente en el siglo XVIII. Fue suprimido en España y América por la Constitución de Cádiz de 1812. Cuando la noticia se hizo pública en Lima, la sede de la Inquisición fue saqueada, pero a pesar de que, en sus tiempos de decadencia, el Santo Oficio fue muy criticado, los historiadores afirman que durante su época de apogeo recibió siempre un masivo apoyo popular.