Respuestas
Respuesta:
La evolución ha dejado sus huellas, grandes y pequeñas, en innumerables patrones de vida. Una nueva investigación demuestra que la masticación ha evolucionado también.
El equipo de Nicolai Konow de la Universidad Brown observó los músculos que controlan el movimiento de la mandíbula y la lengua en peces y mamíferos.
Konow y sus colaboradores han descubierto que los peces usan los músculos de la lengua para empujar hacia dentro, mientras que los mamíferos los utilizan para posicionar la comida del modo más adecuado para triturarla. Las diferencias en la masticación demuestran que los animales han diversificado su forma de masticar y digerir los alimentos y que la evolución debe haber ejercido un papel importante.
Los peces utilizan los músculos de la lengua principalmente para canalizar los alimentos lo más adentro posible en la boca para su procesamiento, como si el pedazo de comida fuera un objeto en una cadena de montaje.
Los mamíferos utilizan los músculos de la lengua para colocar los pedazos de comida del modo más apropiado para que los músculos de las mandíbulas puedan hacer un uso eficaz de los dientes en la labor de masticar.
Esa distinción entre peces y mamíferos con respecto a la masticación responde a una necesidad específica. En los peces, la función de la lengua es transportar la comida con rapidez hacia el interior de la boca, donde, en muchas especies, hay un conjunto (o conjuntos) extra de mandíbulas que trituran la comida. Además, la lengua desplaza agua oxigenada a través de la boca hasta las branquias, para ayudar a los peces a respirar