Los humedales son ecosistemas en los que convergen los medios acuáticos y terrestres. Por esta característica mixta, en su superficie se observan zonas húmedas, semihúmedas y secas. Las riberas fluviales, estuarios, lagos, pantanos y charcos son ejemplos de humedales. Estos ecosistemas presentan un alto grado de biodiversidad; además, la convergencia de agua y suelo es propicia para el desarrollo de formaciones vegetales heterogéneas.
Por su alta capacidad de absorción, los humedales actúan como esponjas que retienen una durante las temporadas lluviosas, amortigua las inundaciones y mantienen reservas del líquido para las temporadas secas. Adicionalmente son trampas naturales para la retención de sedimentos; aportan agua a los acuíferos (depósitos y corrientes de agua subterráneas); surten de agua a quebradas y manantiales y mejoran la calidad del agua gracias a su capacidad filtradora. Los humedales proveen un hábitat a múltiples especies vivientes, lo que representa un gran valor ambiental, con incidencia ecológica, científica, recreacional y paisajística.
En los últimos años, el ser humano ha ocasionado un grave daño a los humedales debido a varios factores que pueden llevar al humedal desde una perturbación leve o Severa hasta una transformación total, lo que conlleva la pérdida definitiva del ecosistema. Los principales factores de perturbación son la urbanización de los espacios cercanos al humedal, con la correspondiente desviación y mala utilización de sus aguas y la pedida de ciclo vital en el ecosistema; la contaminación de las aguas con desechos industriales, residenciales y sedimentos que cambian el porcentaje de oxigeno respirable en el humedal, y afectan gravemente a las especies de flora y fauna; además, se pierde capacidad de retención de agua en temporada de lluvias, lo que ocasiona deslizamientos e inundaciones.
Estamos a tiempo de reversar la situación catastrófica que se avecina. Es necesario crear conciencia ambiental para la protección de nuestros humedales y llevar a cabo acciones conjuntas con las instituciones correspondientes para la descontaminación y el mantenimiento de los humedales en nuestras ciudades y campos.
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