Respuestas
A lo largo del tiempo, las distintas sociedades adoptaron diferentes formas de manejar los recursos. Los grandes cambios sociales, económicos y políticos producidos en el último siglo incidieron notablemente sobre estos patrones de manejo. Teniendo en cuenta estos cambios, el ecólogo argentino Jorge Morello estableció una clasificación que distingue entre tres tipos de manejo: explotacionismo, conservacionismo y ecodesarrollismo. Estos patrones predominaron en diferentes momentos, pero no implica que hayan desaparecido, las tres formas coexisten en muchas partes del mundo.
ü Explotacionismo: extraer mucho y rápido
La característica de esta forma de manejo está sustentada en el uso masivo y acelerado de los recursos sin tener en cuente las leyes naturales que gobiernan los ecosistemas.
En una etapa anterior a 1930, los recursos eran concebidos como un stock fijo. Esta idea está ligada a la necesidad de obtener beneficios económicos en el menor tiempo posible lo que llevó, en muchos casos al rápido agotamiento. Al mismo tiempo se buscaban sustitutos para reemplazar los recursos agotados.
En esta modalidad subyace una confianza absoluta en la tecnología
ü Conservacionismo: cuidar el ecosistema
Pero a raíz de las consecuencias del modelo anterior, se comenzó a tomar conciencia de las leyes naturales que gobiernan el funcionamiento de los ecosistemas. En este patrón se comenzó a considerar los efectos negativos de la explotación incontrolada dominante hasta entonces.
El motor de esto fue el concepto de escasez.
El conservacionismo no tubo igual significado en todo el mundo. Mientras en los países ricos la conservación de los recursos fue practicada con relativo éxito, en los países pobres se hizo casi imposible, ante situaciones de pobreza extrema.
ü Ecodesarrollismo: en busca del equilibrio
A partir del 1960, surgió la preocupación por los daños económicos y sociales producidos por la acumulación de residuos en los ecosistemas (contaminación). En estos años las sociedades advirtieron que la naturaleza es el destinatario final del efecto de los procesos de extracción y transformación de sus elementos.
Esta nueva visión reconoció las limitaciones de las formas de manejo explotacionista y conservacionista, lo cual derivó en una aproximación mucho más cautelosa a la naturaleza. Se trata de respetar al máximo las leyes que rigen los ecosistemas.
Esta forma de manejo considera los tiempos naturales y los tiempos sociales. Propone usar los recursos de forma tal que se logren satisfacer las necesidades actuales sin comprometer listoo