Respuestas
1-Deben existir al menos dos decisiones posibles entre las cuales elegir.
2-Todas las opciones posibles implican actuar contra un principio ético. Por lo tanto es necesario sopesar cuál de esos principios es más importante o tiene un peso mayor.
3-En la mayoría de estos casos, la decisión apropiada suele ser aquella que permita mayores beneficios o menores perjuicios para los afectados.
Sin embargo, hay ocasiones en las cuales el dilema es más complejo, porque no existe una opción que beneficie a una mayoría. Inclusive, puede presentarse el dilema de beneficiar a una u otra persona.
En estos casos suele hablarse de “dilemas éticos perfectos”, porque no existe un factor que ayude a inclinar la balanza hacia una u otra opción.
Estos conflictos provocan parte de los problemas cotidianos de cualquier profesión. A pesar de que existen códigos de ética en todas las universidades y empresas, es inevitable que se presenten situaciones complejas que requieren un análisis especial.