¿Como puedo comprometerme conmigo mismo a continuar con mi educación a pesar de las dificultades?
Respuestas
¿hablamos realmente del Compromiso o de una Obligación?
La Obligación está relacionada al deber y la exigencia. Cuando empezamos a actuar teniendo como eje estos parámetros, nuestra motivación baja y dejamos de actuar naturalmente debido a que visualizamos imposiciones diarias que en el fondo, no tenemos “tantas ganas” de hacer. Desde el Coaching Ontológico, cuando hablamos de compromiso nos referimos al querer. Nace de estar seguro de que lo que se hará es necesario para la satisfacción personal. Entonces, actuando desde el compromiso, nos manifestamos a través de la motivación con mayor fluidez, haciendo de cada acto algo creativo que nos llevará a alcanzar nuestros logros empieza-a-crear-tu-futuro Empieza a crear tu futuro.
Explicar los hechos vs hacer que las cosas pasen
Siempre estamos comprometidos, pero no siempre somos conscientes del eje de ello. Por eso, el siguiente paso a trabajar para estar mejor enfocados en nuestras metas es: saber distinguir si nuestro compromiso está en explicar los hechos o en hacer que las cosas pasen. Cuando nos enfocamos en dar explicaciones, nos encontramos comprometidos con encontrar excusas que justifiquen el no logro de nuestras metas. Nos explayamos sobre los hechos y contamos historias acerca de por qué no sucedió lo que esperábamos, creando un círculo vicioso entre plantearnos un objetivo y luego quejarnos de las circunstancias. Por otro lado, si nos encontramos comprometidos con que las cosas pasen, podemos ver con mayor claridad la carta de posibilidades que tenemos para abrirnos camino hacia nuestras metas: hacemos pedidos, hallamos congruencia entre lo que decimos y hacemos, declaramos y cumplimos con nuestras promesas; incluso estamos dispuestos a aprender más de lo que ya sabemos. Una vez que identificamos con qué estamos comprometidos vamos a poder visualizar los pasos para generar la acción que se alinee con la meta.
¡Presta atención a tu conversación interna!
Puede suceder que tenemos un objetivo en mente y un plan de acción para llevarlo a cabo; pero que una vez que empezamos a accionar, una voz interna nos hace cambiar de objetivo radicalmente o nos desanima. A esta voz se le suele nombrar erróneamente: “falta de compromiso”, pero en realidad es un autosabotaje que surge al no vernos como posibilidad. Cuando estos casos se presenten, ten en cuenta que el compromiso cambiará tu vida. Cuanto más grande sea este, más poderoso será tu futuro, tu visión y con ella, la historia. Con compromiso, hoy será el primer día del resto de tu vida.
Alinea tu compromiso y tu vida
Ahora que ya sabes cómo abordar el compromiso de forma consciente, reflexionando y aprendiendo a diferenciar su manifestación; es momento de que pongas en práctica lo aprendido con estos sencillos pasos, para que al fin puedas aproximarte a lo que – desde el Coaching Ontológico– llamamos “Realidad Ideal”. Elige tu dominio: El primer paso para poner en práctica tu compromiso, es mirar de cerca tu objetivo y hallar el dominio dónde este se encuentra; es decir, en qué parte de tu vida se manifiesta lo que quieres alcanzar: ¿en tu relación de pareja? ¿con tu familia? ¿con tus hermanos? ¿dentro de tu equipo de trabajo? ¿dónde? Situaciones puntuales: Haz un poco de memoria sobre las situaciones que han ocurrido dentro de ese dominio que elegiste. Escoge una situación puntual y pregúntate: ¿Qué compromiso tuviste ahí? Es importante que seas 100% sincero contigo mismo en este paso; pues te hará reflexionar sobre la posición que tomaste frente a tus objetivos. Haz un recuento: A partir de ahí, empieza a revisar qué hiciste con tu compromiso: ¿Estuviste accionando para aproximarte cada día más a tus objetivos?, ¿miraste con optimismo y aprovechaste todas las oportunidades?, ¿estuviste quejándote y lamentándote demás? ¿sentiste que siempre había algo interponiéndose en medio?. Empieza de nuevo: Toma un cuaderno de notas, tu agenda, o abre un archivo nuevo en tu móvil, y empieza a apuntar todas las posibilidades que se te ocurran, que puedan llevarte nuevamente al objetivo que te planteaste hace tanto. ¿Cuál va primero?: Marca un inicio partiendo de lo más sencillo, hasta lo más elaborado. Fíjate en aquellas cosas que sientes que te falta aprender para alcanzar tus sueños; analiza quiénes te rodean y te pueden ayudar. A partir de ese momento, te encontrarás listo para dar el primer paso.
Es importante desde pequeño saber que los estudios son primordiales para poder defenderse en la vida.
Si tenemos unos buenos valores y somos responsable esto no va enseñar que a pesar todas las dificultades que se nos presente debemos continuar con nuestro estudio. Eso si es bueno estudiar algo que nos guste, que nos apasione y nos permita hacerlo con animo y no obligado.
Mi compromiso como persona es lograr mis metas, y estudiar en la noche o lo sábado pero lograrlo.