Realice las siguientes actividades
-ESCRIBA LA DIFERENCIA ENTRE Nutrición Y Alimentación
-Qué ALIMENTOS Elegirías PARA TENER UNA BUENA NUTRICIÓN SALUDABLE PARA LA ETAPA DE NUESTRAS VIDAS
-ENUMERA LOS PASOS QUE DEBEMOS REALIZAR PARA TENER UNA Nutrición ADECUADA.
Respuestas
Respuesta:
La evaluación de teorías y el desarrollo de instrumentos de medición están complejamente relacionados. Hasta la fecha, ningún estudio publicado ha investigado la validez de los tests existentes para evaluar las actitudes alimentarias entre deportistas. El Test de Actitud Alimentaria (EAT) es una evaluación que consta de 26 ítems y que produce un único índice de los desordenes de actitud alimentaria. El análisis original de los factores mostró tres factores interrelacionados: comportamiento alimentario (13 ítems), control oral (7 ítems), y bulimia nerviosa (6 ítems). El objetivo principal del estudio fue examinar la valides factorial del EAT entre muestras de atletas. El segundo objetivo fue investigar las relaciones entre las puntuaciones de actitudes alimentarias y los conceptos psicológicos seleccionados. En la etapa uno, 598 deportistas regulares completaron el EAT. Para evaluar los modelos de un único factor, de tres factores y de cuatro factores se utilizó el Análisis de Confirmación de Factores (CFA), el cual distingue entre la bulimia y la preocupación por la alimentación. La aplicación del CFA sobre el modelo de un único factor (RCFI=0.66, RMSEA=0.10), y sobre el modelo de tres factores (RCFI=0.74; RMSEA=0.09) mostró poca coincidencia. Hubo una coincidencia marginal para el modelo de cuatro factores (RCFI=0.91, RMSEA=0.06). Los resultados indicaron que cinco de los ítems tenían poca influencia sobre los factores. Luego de que estos cinco ítems fueron descartados, los modelos de tres fueron nuevamente analizados. Los resultados del CFA indicaron que el modelo de un único factor (RCFI=0.76, RMSEA=0.10) y el modelo de tres factores (RCFI=0.82, RMSEA=0.08) continuaron mostrando poca coincidencia. Los resultados del CFA para el modelo de cuatro factores mostró índices de coincidencia aceptables (RCFI=0.98, RMSEA=0.06). En la etapa 2 se exploraron las relaciones entre las puntuaciones del EAT, el estado de ánimo, la autoestima y los índices motivacionales en relación con el ejercicio en términos de autodeterminación, disfrute y competencia. Los análisis de correlación indicaron que las puntuaciones relacionadas con el ánimo depresivo tenían una correlación positiva con las puntuaciones relacionadas con la bulimia y los hábitos alimentarios. Además, los hábitos dietarios estuvieron inversamente relacionados con la autodeterminación en el ejercicio. Conjuntamente, los resultados sugieren que el modelo de 4 factores y 21 ítems muestra coeficientes de valides prometedores para ser aplicado entre deportistas y que son necesarias futuras investigaciones par estudiar las actitudes de alimentación entre muestras de atletas.
Explicación:
3.1. Estar hidratados. Esta especialista recuerda que es fundamental una adecuada hidratación y, por ello, se debe incrementar la ingesta de agua así como de frutas y hortalizas que podemos tomar en forma de gazpacho o sopas frías.
2. Seguir la dieta mediterránea, también en vacaciones. “Podría resumirse en utilizar el aceite de oliva como principal grasa de adición, consumir diariamente frutas, verduras, pan y otros alimentos procedentes de cereales (pasta, arroz y especialmente sus productos integrales) o legumbres, moderar la ingesta de carnes rojas y procesadas sustituyéndolas por pescados y huevos; promover la ingesta de alimentos poco procesados y prescindir de los dulces y los pasteles”, enumera Tapia. En su opinión, este patrón nutricional debe mantenerse por sus beneficios para la salud como la prevención de la obesidad y las enfermedades cardiovasculares.
3. Consumir frutas y hortalizas de temporada. En esta época hay muchas frutas y hortalizas que, además de hidratarnos, son muy bajas en calorías. A media mañana y a media tarde son buenos momentos para tomar piezas de fruta como porciones de sandía o melón que a pesar de su sabor dulce son bajas en azúcares añadidos y aptas para personas con diabetes.
4. Eliminar las bebidas calóricas. Para controlar el peso deben evitarse completamente las bebidas que aporten calorías como el alcohol, los refrescos azucarados e incluso aquellas etiquetadas como productos sin alcohol. En cambio, la SEEN sugiere sustituirlas por agua e infusiones.
5. Moderar el consumo de carne. Se aconseja tomar más raciones de pescado que de carne a la semana, sobre todo, limitar los platos con carne roja. En concreto, se recomienda tomar pescado cinco o seis veces de las cuales al menos tres deberían ser de pescado azul.
6. Cuidar las cantidades. Hay que intentar no excederse con la cantidad de comida y huir de las comidas copiosas. “Debemos controlar la ingesta de aquellos alimentos que, aun siendo saludables, aportan muchas calorías si se toman en exceso como los frutos sexos, las legumbres, la pasta o el arroz”, apunta Tapias.