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Respuesta:
Un día fue a un baile, allí se encontró con muchos amigos, los cuales se alegraron al verlo, y junto con ellos se emborrachó. Luego llegaron dos personas de piel morena, a los cuales llamó “el negro y la negra” y empezó una pelea. Primero se burló de la mujer, diciéndole “Va… ca… yendo gente al baile”, a lo cual ésta le responde “más vaca será su madre”. Siguió con las provocaciones, pero ahora riéndose del color de su tés. Después se acercó a su marido, y le dijo “Por… rudo… que un hombre sea nunca se enoja por esto”, pero éste se defendió y le contestó “Más porrudo serás vos, gaucho rotoso”. Estas palabras hicieron que Fierro se enojara y reaccionó pegándole con una botella de vidrio. El “negro” tomó un cuchillo y le hizo dos tiros seguidos, pero logró detenerlos. El gaucho, enfurecido, le da una puñalada con su facón. Todo se sale de control y acaba matándolo. Más tarde se entera que fue enterrado sin que lo velaran ni le rezaran. Dicen que desde entonces, cuando la noche está tranquila, suele verse una luz mala, como de un alma que anda en pena. La culpa le genera ganas de sacar sus huesos y llevarlos al camposanto.