Respuestas
Respuesta:
a influencia de los medios de comunicación en la cultura, en
los estilos de vida, en los comportamientos y, sobre todo, en
la formación de los valores de la población es evidente.
España es el tercer país europeo en tiempo de «consumo» de televisión por habitante. Cada niño o niña de Andalucía suele ver, aproximadamente, unas tres horas y media de televisión al día. A lo largo de un año, un ciudadano medio, recibe más de 14.000 impactos publicitarios por esta vía. El número de muertes, agresiones y escenas violentas que contempla un sujeto a lo largo de su vida supera el de cualquier guerra...
En los contenidos televisivos predominan valores tales
como la competitividad, la agresividad a la hora de resolver
los conflictos, el consumismo, la discriminación más o menos
evidente de la mujer y de colectivos sociales. Menor espacio
se les reserva a otros valores, más deseables a nuestro juicio,
tales como la solidaridad, el altruismo o la educación para la convivencia.
En el último decenio nuevos medios de comunicación aparecen –irrumpen según la expresión alarmista de algunos– en nuestras vidas a una velocidad inusitada. Internet (en nuestro país
hay ya más de un millón de personas «enganchadas» a la red), la televisión digital, la informática
interactiva... son algunos de ellos. También en estos nuevos medios se proyectan valores, estilos
de vida, modas y pautas de conducta social que se unen a otros soportes más tradicionales pero
con importante influencia aún en algunos sectores de población: radio, prensa y revistas de diversos tipos, publicidad estática, cine...
Estas son realidades que podemos constatar cotidianamente y refrendar en cualquiera de
los múltiples estudios que sobre los medios de comunicación están a nuestra disposición. Datos
que, siguiendo la terminología de Umberto Eco, pueden ser interpretados desde una perspectiva
«apocalíptica» (la televisión como una clepsidra que se introduce en nuestras vidas y nos absorbe,
manipulándonos hasta extremos inimaginables) o «integrada», observando los medios de comunicación desde una visión optimista como la gran ventana que nos permite conocer y comprender mejor el mundo, que posibilita el intercambio de opiniones y puntos de vista, en los que
se proyectan la multiplicidad y riqueza de valores presentes en la aldea universal que habitamos.
Junto a un posicionamiento más o menos favorable o contrario a la incidencia de los medios
de comunicación en los valores sociales, cabe plantearse, sobre todo por parte de las personas
que de una forma u otra estamos relacionadas con la educación, una reflexión más profunda. Se
plantean en este ámbito cuestiones tales como: ¿cómo son recibidos e interpretados por los niños
y jóvenes los mensajes de los medios de comunicación?, ¿cómo inciden los medios en la formación global de la persona?, ¿qué papel puede y debe jugar la escuela a este respecto?, ¿qué tipo
de interacción se establece entre la escuela ordinaria y esta otra «escuela paralela» de los medios
de comunicación?, ¿y entre éstas y la educación familiar?, ¿hay algo que pueda hacerse desde las
aulas para mejorar una situación que no nos satisface plenamente?...
Explicación:ojala te ayude