Respuestas
Respuesta:
este es un ejemplo
Explicación:
El loro y el inglés
Cuentan que un inglés, que jamás había salido de Londres ni conocía los pericos, llegó a Veracruz, y en busca de un hotel se internó en la ciudad.
Caminaba dirigiendo miradas investigadoras hacia todas las puertas, cuando un loro, volando desde un balcón, fue a posarse en la banqueta, casi a los pies del hijo de Albión.
Los vivos colores del plumaje del animal, más la figura de su pico y la mansedumbre que demostraba, llamaron la atención del viajero a tal grado, que se detuvo e inclinó extendiendo la mano para tratar de tomar al pájaro.
Iba ya asegurarlo cuando el loro, retirándose pausadamente con ese aire zalamero que suele tomar en las ocasiones solemnes, dijo:
–Lorito, ¿eres casado? ¡Ah, que regalo!
El asombro del británico fue terrible, retrocedió como si hubiera visto una serpiente y, quitándose ceremoniosamente el sombrero, exclamó dirigiéndose al perico:
–Perdone usted, caballero; ¡yo creí que era usted pájaro!
Vicente Riva Palacio
Desarrollo: Un inglés que no conocía a los pericos llegó a Veracruz y buscó un hotel. Encontró un perico en la banqueta y se asombró tanto por su plumaje que quiso atraparlo.
Clímax: El perico habló y el sorprendido inglés dio un salto y con gran respeto se quitó el sombrero.
Desenlace: El inglés dijo al perico: Perdone señor, pensé que era usted un pájaro.
Narrador: El autor del relato.
Mensaje: Los errores que se cometen por el desconocimiento de las cosas