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Introducción
Los mapas conceptuales son una herramienta muy poderosa para organizar, sintetizar y analizar información y al mismo tiempo, se comparte conocimiento de forma colaborativa en las actividades formativas diseñadas en el proceso de aprendizaje. Además, los Mapas Conceptuales constituyen una buena alternativa metodológica para poder trabajar y evaluar competencias, tanto genéricas, como específicas.
Este módulo de Mapas Conceptuales forma parte del itinerario formativo que se ha diseñado sobre elaboración de contenidos digitales en la Universidad Rey Juan Carlos. Espero que esta guía,los materiales proporcionados en el aula virtual y el desarrollo del webinar que se ha programado, faciliten que te puedas plantear el uso de esta herramienta metodológica y evaluativa en las aulas universitarias.
No debes obviar que la intención de este módulo es mostrar cómo los mapas conceptuales nos pueden ayudar a mejorar nuestra labor docente, e incluso investigadora.
Las primeras de la cartografía fueron escritas en el siglo XVIII por cartógrafos europeos que presentaban los mapas de su tiempo como la culminación de un largo proceso histórico de perfeccionamiento técnico. Esta visión positivista permaneció en vigor hasta la segunda mitad del siglo XX. Durante ese tiempo, el interés por los mapas antiguos provino esencialmente de tres colectivos: geógrafos e historiadores, que trataban de extraer información sobre acontecimientos pasados plasmados en mapas; archiveros y bibliotecarios, que buscaban dar a conocer los fondos de sus instituciones, y coleccionistas y vendedores que participaban en un lucrativo negocio.[1]
Desde mediados del siglo XX y, sobre todo, durante la década de los 80's, tuvo lugar un cambio de paradigma en el estudio de los mapas antiguos, sobre todo en el mundo anglosajón. Académicos como David Woodward y J.B. Harley llamaron la atención sobre cuestiones que hasta entonces habían pasado desapercibidas, por ejemplo el estudio de los mapas antiguos como objetos físicos, fruto de cierto proceso de producción; o la inevitable carga ideológica que acompaña a cada mapa y que a menudo no aparece de manera explícita.[1] Este nuevo paradigma cristalizó en el proyecto de una historia monumental de la cartografía, en inglés, cuyo primer volumen fue publicado en 1987 y que actualmente (2020) todavía no ha sido finalizada.[2]