Respuestas
Respuesta:
En todos los grupos de invertebrados se han encontrado células neurosecretoras y a pesar que sus acciones no se conocen en todos, algunos experimentos han permitido elaborar algunas conclusiones. En los cnidarios, como la hidra, se cree que ciertas secreciones neuronales promueven el crecimiento durante la gemación, el crecimiento y la regeneración. En los moluscos cefalópodos, como el pulpo, hay células neurosecretoras en las glándulas ópticas que intervienen en la maduración sexual, ya que estimulan el desarrollo de los órganos reproductores y sus productos. Las lombrices adultas pierden peso y dejan de poner huevos si se separan los ganglios cerebrales, características que recuperan cuando se regenera la conexión entre los ganglios. Los arácnidos poseen células neurosecretoras en el cerebro, y sus secreciones parecen intervenir en la muda y la maduración sexual.