Respuestas
Respuesta:
La realidad nos muestra que en la actualidad la mayoría de países son
culturalmente diversos, según estimaciones recientes, los 184 estados
independientes del mundo contienen más de 600 grupos de lenguas vivas y
5.000 grupos étnicos (Garreta, 2000). Son escasos los países cuyos
ciudadanos comparten el mismo lenguaje o pertenecen al mismo grupo étnico
nacional.
Actualmente, en la era de la globalización se da la paradoja de que la
sustitución de las sociedades tradicionales por el orden social moderno
(urbano, industrial, capitalista) no solo no suprime las diferencias lingüísticas,
religiosas, culturales, etc., entre las distintas sociedades, sino que por el
contrario, las acrecienta. En este sentido, la diversidad cultural, étnica y
lingüística deja de ser un rasgo específico de algunas sociedades particulares
(Estados Unidos, Canadá, Australia) para gradualmente extenderse al conjunto
el planeta.
Nos encontramos inmersos en un mundo verdaderamente multicultural e
interdependiente que presenta el desafío de cómo comprenderse e interactuar,
presentando esta diversidad una serie de temas importantes y potencialmente
decisivos.
Así mayorías y minorías se enfrentan cada vez más respecto a temas como los
derechos lingüísticos, autonomía regional, representación política,
reivindicaciones territoriales, política de la inmigración y ciudadanía, etc.
Encontrar respuestas éticamente defendibles y políticamente viables a dichas
cuestiones constituye el principal desafío al que se enfrentan las democracias
en la act
ualidad.
Y es aquí, cuando se afronta el desafío de la diversidad cultural, que nos
encontramos con presupuestos teóricos y conceptos sobre la diversidad
cultural situados desde diferentes ópticas, por ejemplo: la ciudadanía, la
identidad, el tema lingüístico, la democracia o todos los matices o posiciones
intermedias que puedan derivar, encontrando mucha veces un abuso del
término “diversidad cultural” al aplicarlo de forma indiferenciada a fenómenos
de naturalezas distinta.
Explicación:
En Venezuela existe un número considerable de creaciones fundamentales de la diversidad en manos del hombre, entre las cuales algunas han sido reconocidas por la UNESCO como patrimonio cultural intangible de la humanidad.
Ellas son:
- Los “Cantos de llano colombo-venezolanos”
- Los Diablos Danzantes de Corpus Christi
- El Carnaval de El Callao
- La Parranda de San Pedro de Guarenas y Guatire