Respuestas
Primero, la meta es el punto al que se quiere llegar, el propósito final que se pretende alcanzar, aunque no se tenga un tiempo definido para ello.
Por ejemplo: los números de ventas que se pretenden alcanzar a lo largo de un tiempo específico.
Los objetivos, en cambio, son una serie de pautas o pasos a seguir para poder alcanzar esa meta que nos proponemos.
Retomando el ejemplo anterior, los objetivos para alcanzar las meta en números de venta, podrían ser varios:
diseñar una estrategia de mercadotecnia para la captación de nuevos clientes;
garantizar la presencia del producto en todos los puntos de venta para que estén siempre a disposición del cliente;
realizar encuestas sobre servicio y calidad para aumentar la calidad del producto y por ende su consumo.