Respuestas
1Los objetivos de la temática son, en primer lugar, dar a conocer de manera precisa, características técnicas de las prácticas de los artesanos que fabrican objetos metálicos, para luego poder reconstituir cadenas operativas y establecer cómo estas determinan sus estilos de vida y maneras de pensar. Los aspectos técnicos abarcan principalmente la elección de las aleaciones —los metales siendo ya previamente elaborados— y los procesos empleados para la fabricación de cada pieza con sus respectivas herramientas asociadas. Esto está relacionado con los vestigios materiales (moldes, crisoles, martillos, etc.) pero también con bienes muebles tales como hornos, fosas, yunques fijos para la deformación; y finalmente, con el taller en el cual se lleva a cabo la fabricación.
2En términos arqueológicos se trata, entonces, a partir de los vestigios conservados, de estudiar las estructuras y también los vestigios vinculados a las actividades de fabricación para entender el funcionamiento del taller y su organización espacial. Es necesario interesarse por todos los vestigios procedentes de las actividades artesanales, lo cual implica tomar en cuenta otros materiales, además del metal, como rocas, arcillas, arena, madera, cuero, etc. Más allá, son los aspectos sociales que deseamos reconstituir. Intercambios de materiales, objetos, conocimientos e individuos intervienen obligatoriamente en las acciones de producción que se desarrollan en un contexto económico, el cual, queda aún por definir. La funcionalidad de los artefactos no siempre es fácil de interpretar; por ejemplo, los objetos de metal producidos para un uso monetario, o pre monetario, dependen de elecciones específicas cuyos motivos son a veces difíciles de percibir. Entre los aspectos sociales, intentamos comprender la organización del mundo de los artesanos. ¿Están agrupados en una corporación vinculada al oficio y dotada de cierto poder?, o más bien ¿Son totalmente dependientes de una elite que dirige, más específicamente la vida política y/o religiosa? La cuestión de las modalidades de transmisión de los conocimientos es también muy importante. Naturalmente, el aprendizaje constituye el medio esencial, pero se debe asimismo examinar el modo de contratación de los aprendices, el cual puede estar muy vinculado a los lazos familiares. Evidentemente, el estudio arqueológico aporta pocos elementos de respuesta a estos interrogantes porque se inscriben más en el ámbito social. Sin embargo, el tamaño de los talleres, su eventual especialización y su posible agrupamiento en barrios son argumentos indirectos que deben ser considerados (Chardron-Picault & Pernot, 1999: 195-201).
3Una técnica puede ser descrita por una cadena operativa; esta asocia materiales y herramientas a usos y conocimientos. Nótese que los materiales y las herramientas forman parte de la cultura material porque constituyen, en algunos casos, vestigios arqueológicos, mientras que los gestos y conocimientos, que se asocian a la parte inmaterial de una «cultura técnica», solo son accesibles de manera indirecta.