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Respuesta:
Había una vez un conejo muy, pero muy terco, que tenía un mejor amigo, era un caracol, los dos eran muy opuestos pero aún así terminaron siendo muy buenos amigos.
Un día mientras el caracol y el conejo hablaban, apareció un oso que les dijo que parecía que el clima no iba a ser bueno mañana, y probablemente hubiera una inundación, el no estaba tan seguro de esto, pero prefería irse muy lejos a tener que morir con esa inundación, el caracol y los demás animales estaban yéndose lejos para evitar la inundación. Mientras que el conejo solo decía:
- Esas son tonterías caracol, no va a pasar nada, estoy muy seguro, hay que quedarnos aquí. Mientras que el caracol le dijo:
- No lo sé conejo, el oso dijo que era posible, prefiero irme a quedarme y morir, si no pasa nada volveremos.
El conejo seguía firme con su idea y no le hizo caso al caracol, todos los animales se fueron excepto el conejo.
Al día siguiente, en la tarde, empezó una gran inundación, el conejo estaba muy asustado, no sabía que hacer, estaba arrepentido de su muy mala decisión, ya no había nada que más hacer y murió.
Explicación:
Espero te ayude, hice lo mejor que pude ah