2.Elabora un artículo de opinión de la importancia de la Virgen María como modelo de Madre, misionera y servidora
Respuestas
Explicación
La Virgen María en la Iglesia católica se refiere al concepto que tiene la Iglesia católica sobre María, la madre de Jesús, así como su veneración. La Iglesia propone a María como modelo de obediencia (Lucas 1,38) en contraste con la desobediencia de Eva (Gn 3,6) idea que se encuentra desde los Padres de la Iglesia. En la teología católica, la mediación de María nace de la mediación única y principal de Jesucristo (1 Tim 2,5-6) de la cual depende. En ese sentido es una mediación secundaria pero especial por su singular papel en el plan de la salvación. El capítulo VIII de la Constitución Dogmática Lumen Gentium del Concilio Vaticano II explica la figura de María dentro de la Iglesia católica.
la Virgen María es Madre de Dios en cuanto es verdadera madre de Jesús que es Dios. María no engendró al Verbo (segunda persona de la Trinidad) ya que, como Dios, es eterno, pero sí a Jesús que es el Verbo hecho hombre. El razonamiento que se sigue es común a todo ser: Una madre no engendra el alma sino sólo el cuerpo de su hijo, pero aún con la unión de alma y cuerpo es llamada madre de él. Así María es llamada Madre de Dios ya que engendró el cuerpo de Cristo que está unido substancialmente a la segunda persona de la Trinidad.
Esta maternidad divina, dentro de la teología católica, es la base de todas las prerrogativas que tiene María, siendo la de más alta dignidad.
La divinidad de Jesucristo, según lo entiende la Iglesia católica, se encuentra afirmada en los siguientes textos de la Biblia:
En el principio era el Verbo, el Verbo estaba con Dios y el Verbo era Dios. Juan 1:1
Tomás respondió: "¡Señor mío y Dios mío!". Juan 20:28
A ellos también pertenecen los patriarcas, de los cuales, según la carne, vino Cristo, el cual es Dios sobre todas las cosas, bendito por los siglos. Amén. Romanos 9:5
...mientras aguardamos la esperanza bienaventurada y la manifestación gloriosa de nuestro gran Dios y Salvador Jesucristo. Tito 2:13
Y fue definida en el Concilio de Nicea, el cual declaró que Jesucristo es consustancial al Padre, es decir, verdadero Dios.
La doctrina de la maternidad divina se encuentra desde los inicios del cristianismo, por ejemplo San Ignacio de Antioquía a fines del siglo I en su epístola a los Efesios dice:
Dios Nuestro Señor Jesucristo nació del seno de María, según la dispensación de Dios, de la semilla de David, por el poder del Espíritu Santo
Pero también halló detractores desde esas épocas tempranas: el caso más claro es el de los gnósticos y el de Nestorio. Los primeros, al distinguir el alma y el cuerpo como contrarios, uno bueno y el otro malo, negaban que un Dios pueda hacerse hombre realmente. Sus doctrinas fueron combatidas por los primeros padres como Justino, Ireneo, Tertuliano.
El ataque más fuerte vino de parte de Nestorio, patriarca de Constantinopla, quien hacía de Jesús un simple alojamiento de la divinidad (Theophoron, ‘portador de dios’) y, por ende, predicando que María no podía ser llamada Madre de Dios a la cual llamaba Christotokos. Su mayor contrincante fue Cirilo de Alejandría quien defendió el título dado por los Padres de la Iglesia a María de Theotokos. Un sínodo en Roma en el año 430 condenó las enseñanzas de Nestorio. El Concilio de Éfeso en 431, luego de gran lucha por parte de los partidarios de Nestorio terminó condenando su doctrina y reafirmando oficialmente como dogma la doctrina de la maternidad divina, al mismo tiempo la personalidad única y divina de Jesucristo bajo las dos naturalezas humana y divina:
Pues, no decimos que la naturaleza del Verbo, transformada, se hizo carne; pero tampoco que se trasmutó en el hombre entero, compuesto de alma y cuerpo; sino, más bien, que habiendo unido consigo el Verbo, según hipóstasis o persona, la carne animada de alma racional, se hizo hombre de modo inefable e incomprensible y fue llamado hijo del hombre, no por sola voluntad o complacencia, pero tampoco por la asunción de la persona sola, y que las naturalezas que se juntan en verdadera unidad son distintas, pero que de ambas resulta un solo Cristo e Hijo; no como si la diferencia de las naturalezas se destruyera por la unión, sino porque la divinidad y la humanidad constituyen más bien para nosotros un solo Señor y Cristo e Hijo por la concurrencia inefable y misteriosa en la unidad... Porque no nació primeramente un hombre vulgar, de la santa Virgen, y luego descendió sobre Él el Verbo; sino que, unido desde el seno materno, se dice que se sometió a nacimiento carnal, como quien hace suyo el nacimiento de la propia carne... De esta manera [los Santos Padres] no tuvieron inconveniente en llamar madre de Dios a la santa Virgen.
Concilio de Éfeso
lo principal sera creo :v