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Respuesta:
Bueno, al principio el rey de las Islas de Babilonia decide hacer un laberinto difícil para encontrar su salida...
Según el cuento.. esto le fue difícil a los arquitectos ya que "la confusión y la maravilla son operaciones propias de Dios y no de los hombres"
Pero lograron hacer lo que el rey quería. Tiempo después llego a la corte un rey de los Árabes y el rey lo quiso probar para ver cuan inteligente era y lo mandó al laberinto.
En el laberinto anduvo y casi se ocultaba el sol hasta que le pidió ayuda divina y logró salir del laberinto.
Cuando salió no se quejó pero le dijo al rey de Babilonia que "que él en Arabia tenía otro laberinto y que, si Dios era servido, se lo daría a conocer algún día"
Entonces regreso a Arabia donde reunió sus tropas y conquisto Babilonia (a tal punto que derrumbo los castillos e hizo preso al mismo rey)
(Básicamente lo secuestro :P)
Lo llevó al desierto(3dias de camino) donde le dijo que;
"Oh, rey del tiempo y substancia y cifra del siglo!, en Babilonia me quisiste perder en un laberinto de bronce con muchas escaleras, puertas y muros; ahora el Poderoso ha tenido a bien que te muestre el mío, donde no hay escaleras que subir, ni puertas que forzar, ni fatigosas galerías que recorrer, ni muros que veden el paso"
(Bueno en esa parte lo elogia al principio, le recuerda el laberinto de su reino y le dice que el laberinto de Arabia no tenia nada de el de él pero que igual seguía siendo un lugar sin salida)
Y lo dejo en el desierto donde murió de hambre y sed
Fin
Respuesta:
«Los dos reyes y los dos laberintos»
es un breve relato que trata dos temas.
Por un lado la soberbia que muestra el rey de Babilonia al construir el laberinto (un laberinto no natural, sino hecho por la mano del hombre); con esto atenta contra Dios porque “la confusión y la maravilla son operaciones propias de Dios”.
Por otro, el tema de la venganza; el rey de Arabia se siente vejado y su venganza es tremenda “estragó Babilonia” y apresó al rey. Aparece otra vez el tema del laberinto, pero esta vez como un laberinto “natural” no hecho por los hombres sino obra de Dios; es el desierto, donde la venganza se cumple.