SEGUN LO QUE LEISTE DEL TEXTO ¿Qué es un ciclo biogeoquímico?
Los ciclos biogeoquímicos comprenden una serie de caminos realizados por la materia, que escapa de la biosfera a través
de otros sistemas (atmósfera, hidrosfera o litosfera) antes de retornar a ella. El tiempo de permanencia de los elementos
en los distintos medios es muy variable, denominándose almacén o reserva aquel lugar donde dicha permanencia es
máxima.
Los ciclos biogeoquímicos están perfectamente ajustados por diversas realimentaciones y en ellos se encuentran
implicados el ciclo del agua, el ciclo geológico y los procesos vitales de fotosíntesis y respiración.
Como cualquier otro ciclo de materia, los ciclos biogeoquímicos tienden a ser cerrados (entra y sale energía de ellos, pero
no materia). Sin embargo, las actividades humanas ocasionan la apertura y la aceleración de estos, con lo que contravienen
uno de los principios de sostenibilidad en los que se basa el funcionamiento de los ecosistemas: reciclar al máximo la
materia, de forma que se obtengan nutrientes, que no escapen a otros lugares y que no se produzcan desechos.
Respuestas
Respuesta:
En un principio no faltó la organización en las disposiciones para construir la Torre de Babel; de hecho, quizás el orden era excesivo. Se pensó demasiado en guías, intérpretes, alojamientos para obreros y vías de comunicación, como si se dispusiera de siglos. En esos tiempos, la opinión general era que no se podía construir con demasiada lentitud; un poco más y hubieran abandonado todo, y hasta desistido de echar los cimientos. La gente razonaba de esta manera: lo esencial de la empresa es el pensamiento de construir una torre que llegue al cielo. Lo demás es del todo secundario. Ese pensamiento, una vez comprendida su grandeza, es inolvidable: mientras haya hombres en la tierra, existirá también el fuerte deseo de terminar la torre. Por consiguiente no debe preocuparnos el futuro. Al contrario: el saber de los hombres adelanta, la arquitectura ha progresado y seguirá progresando; de aquí a cien años el trabajo para el que precisamos un año se hará tal vez en pocos meses, y más resistente, mejor. Entonces, ¿a qué agotarnos ahora? Eso tendría sentido si cupiera la esperanza de que la torre quedará terminada en el espacio de una generación. Esa esperanza era imposible. Lo más creíble era que la nueva generación, con sus conocimientos superiores, condenara el trabajo de la generación anterior y demoliera todo lo adelantado, para recomenzar. Tales pensamientos paralizaron las energías, y se pensó menos en construir la torre que en construir una ciudad para los obreros. Cada nacionalidad quería el mejor barrio, y esto dio lugar a disputas que culminaban en peleas sangrientas. Esas peleas no tenían fin; algunos dirigentes opinaban que demoraría muchísimo la construcción de la torre y otros que más valía aguardar que se reestableciera la paz. Pero no sólo en pelear pasaban el tiempo; en las treguas se dedicaban a embellecer la ciudad, lo que provocaba nuevas envidias y nuevas peleas. Así pasó la era de la primera generación, pero ninguna de las siguientes fue distinta; sólo aumentó la destreza técnica y con ella el ansia guerrera. Aunque la segunda o tercera generación reconoció la insensatez de una torre que llegara hasta el cielo, ya estaban demasiado comprometidos para abandonar los trabajos y la ciudad.
El vaticinio de que cinco golpes sucesivos de un puño gigantesco aniquilarán la ciudad, está presente en todas las leyendas y cantos de esa ciudad. Por esa razón el escudo de armas de la ciudad incluye un puño.
Explicación:
perdonnn