agamen el favor de ayudarme. cual es el mensaje que nos dejan de mateo 7.29
los gracioso los reporto
las cosas de Dios no se juegan
Respuestas
Respuesta:
“Y cuando terminó Jesús estas palabras, la gente se admiraba de Su doctrina; porque les enseñaba como quien tiene autoridad, y no como los escribas.” (Mateo 7:28-29)
Explicación:
La Biblia dice que estaban “admirados con Su doctrina” (enseñanza). Ellos se quedaron admirados; y quien podría culparlos, ellos realmente nunca habían escuchado a alguien hablar o enseñar como Cristo.
Las multitudes estaban asombradas de las enseñanzas de nuestro Señor, ya que sus oídos estaban acostumbrados a escuchar a los maestros fariseos de la Ley que eran un mero reflejo de la autoridad, y no muy bueno en eso. Jesús, por otro lado, fue y es la máxima Autoridad. Él posee todo el poder y el conocimiento; ¡y esta diferencia fue extremadamente obvia para Sus oyentes!
Los fariseos eran un mero pretexto, incapaces de cumplir lo que predicaban; ellos estaban recitando pasajes memorizados, mientras que Jesús, que habló el mundo a la existencia, hablaba con autoridad.
Había muchos ‘rabinos’ que habían dedicado toda su vida a estudiar las Escrituras, pero la enseñanza de Jesús alcanzó a la multitud como especial. Él los recordó de las recompensas por la perseverancia en amar a Dios, Él expuso las palabras de Dios como la base en la cual ellos podían confiar, y luego reveló su significado, contrastando Su autoridad con la enseñanza tradicional.
Jesús enseñó con una comprensión segura de la intención de la ley, y Él no estaba simplemente recitando lo que las Escrituras decían o citando las opiniones prevalecientes de los escribas; los teólogos profesionales de sus días y la autoridad en materia de “ley religiosa”. Su mensaje era radicalmente diferente de la de ellos y eso dejó a la multitud atónita.
Respuesta:
El Sermón del Monte. Las palabras de Jesús seguramente sorprendieron a quienes lo escucharon pues nunca habían oído a nadie enseñar como él. Jesús citó repetidas veces de las escrituras Hebreas inspiradas (Antiguo Testamento). Su mensaje es directo, tiene un estilo sencillo y un significado claro. Jesús discursaba con una autoridad que podían percibir. Hablaba como representante de Dios y respaldaba su instrucción en la Palabra de Dios (Juan 7:16). Lo que decía llegaba al fondo de los asuntos, así como al corazón de su público. Les enseñó a hallar la felicidad, a orar, a buscar el Reino de Dios... Su mensaje despertó el corazón de quienes tenían hambre de verdad y justicia, al grado de que estuvieron dispuestos a ‘repudiarse’ a sí mismos y abandonarlo todo por seguirlo (Mateo 16:24) (Lucas 5:10, 11).
¡Qué testimonio de la fuerza de las palabras de Cristo!