Respuestas
Respuesta:
1. Ordena tu lista con inteligencia
Lo primero para realizar una lista útil es darle un orden de prioridad. Focaliza primero todas las tareas que debes realizar en el día. Una vez todas sobre la mesa ordénalas según su importancia, situando las más urgentes al principio. Esto te permitirá un mejor aprovechamiento del tiempo ya que tanto la energía como la concentración disminuyen con el transcurso de la jornada.
2. Aplaza, delega o elimina:
Si estás en un día ocupado, como el 99% de las personas, es muy probable que no alcances a terminar tu lista por completo. En esos casos existen tres alternativas.
3. Sé pragmático
Anda al grano. Sé conciso. Las listas eternas son solamente un engaño. Ve por lo prioritario y proponte concretarlo con voluntad. Las listas largas finalmente te desmotivan y terminarás aplazando muchas de ellas. Puedes por último realizar listas cortas y de ir sobrando tiempo en tu día, puedes añadir nuevas tareas. No te sobrecargues.
4. Sé realista:
Si realmente queremos que la lista de tareas cumpla su propósito debemos cumplir con las metas que nos proponemos en nuestras listas y para eso la cantidad de tareas y el tiempo que disponemos para realizarlas son fundamentales. tenemos que hacerlas realistas. Aquí es donde tenemos que recordar el consejo de “priorizar hasta que duela”.
Respuesta:
1. Ordena tu lista con inteligencia
Lo primero para realizar una lista útil es darle un orden de prioridad. Focaliza primero todas las tareas que debes realizar en el día. Una vez todas sobre la mesa ordénalas según su importancia, situando las más urgentes al principio. Esto te permitirá un mejor aprovechamiento del tiempo ya que tanto la energía como la concentración disminuyen con el transcurso de la jornada.
2. Aplaza, delega o elimina:
Si estás en un día ocupado, como el 99% de las personas, es muy probable que no alcances a terminar tu lista por completo. En esos casos existen tres alternativas.
3. Sé pragmático
Anda al grano. Sé conciso. Las listas eternas son solamente un engaño. Ve por lo prioritario y proponte concretarlo con voluntad. Las listas largas finalmente te desmotivan y terminarás aplazando muchas de ellas. Puedes por último realizar listas cortas y de ir sobrando tiempo en tu día, puedes añadir nuevas tareas. No te sobrecargues.
4. Sé realista:
Si realmente queremos que la lista de tareas cumpla su propósito debemos cumplir con las metas que nos proponemos en nuestras listas y para eso la cantidad de tareas y el tiempo que disponemos para realizarlas son fundamentales. tenemos que hacerlas realistas. Aquí es donde tenemos que recordar el consejo de “priorizar hasta que duela”.