¿En qué aspectos crees que se equivocó cuando decidió iniciar su negocio? ¿Por
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Por desgracia, esta autonomía también irá acompañada de algunos aspectos negativos que conlleva la gran responsabilidad de gestionar un negocio. La toma de decisiones no va a ser un camino fácil, algunas serán verdaderamente duras y estresantes, algunas respuestas vendrán a ti de forma natural y para otras será necesario estar preparado.
Estas son cinco decisiones inevitables que describe Jayson Demers en The Glove And Mail, y que deberás afrontar antes o después como emprendedor:
1.- Abandonar tu empleo. La decisión de iniciar un negocio supone en la mayoría de los casos tener que dejar el trabajo actual, y de ahí que se trate de una determinación muy importante. Todas las empresas comienzan con una idea, que más tarde se convierte normalmente en un plan de negocio - o por lo menos en un proyecto que plasme el desarrollo de esa inspiración inicial. A partir de ahí, tendrás que considerar detenidamente la viabilidad de dicho negocio, así como valorar los sacrificios que serán necesarios una vez que se ponga en marcha.
Por lo tanto, ya sea por tener que dejar el trabajo, que echar mano de tus ahorros o bien buscar ayuda de amigos y familiares, es evidente que se trata de una decisión valiente y difícil, que te va a suponer esfuerzos y renuncias, siendo la primera de ellas comunicar a tu jefe que abandonas tu trabajo actual.
2.- La financiación del negocio. Una vez tomada la decisión, para poder seguir adelante con tu proyecto vas a necesitar contar con cierta cantidad de dinero. Son muchas y muy variadas las opciones para financiar un negocio, y todas tienen sus ventajas y desventajas, que deberán ser consideradas. Se trata de otra decisión difícil y especialmente determinante, pues de ella va a depender tu éxito potencial.
Así pues, asumir por tí mismo la financiación de tu negocio te proporcionará una autonomía total, y, sin embargo, también podría llevarte a serias dificultades financieras. Decidirte por un inversor de capital de riesgo o angel business te ayudaría a rebajar el estrés y la preocupación, pero también podría obligarte a renunciar a un cierto grado de control sobre tu empresa. El ‘crowdfunding’ es otra opción, pero puede ser impredecible y difícil de manejar.