Respuestas
Respuesta:
Bolsas de plástico
Ropa de fibras sintéticas
Botellas de PVC
Envases de Tetra pack
Pilas y Baterías
Botellas y frascos de vidrio
Lamparitas rotas
Microprocesadores que ya no funcionan
Latas de conserva
Bolsas de nylon
Cartuchos de impresora
Neumáticos deteriorados
Chatarra de fundiciones
Cables rotos
Baterías de automóviles
Jeringas
Agujas
Sal: La sal de mesa es una sustancia inorgánica formada por sodio y cloro.
Oro: Es un elemento químico puro. Es un metal blando y pesado, que fue utilizado tradicionalmente para crear monedas. Por su alta resistencia a la corrosión, es utilizado en la industria y en la electrónica.
Vidrio: Aunque conocemos principalmente el vidrio fabricado por el ser humano, el mismo también puede encontrarse en la naturaleza. Por ejemplo, la obsidiana. El vidrio que vemos en los objetos cotidianos se fabrica a partir de arena de sílice, carbonato de sodio y caliza, fundiéndolos a 1.500 grados.
Cloro, lejía o lavandina: Lo que conocemos habitualmente como cloro, lejía o lavandina es en realidad hipoclorito de sodio, es decir que es un compuesto de cloro, sodio y oxígeno.
Agua destilada: En la naturaleza, el agua contiene una enorme cantidad de sustancias orgánicas, incluso el agua apta para consumo humano. Pero la sustancia agua está formada por moléculas que contienen únicamente hidrógeno y oxígeno, es decir que es una sustancia inorgánica. Para obtener agua en estado puro se utiliza el proceso de destilación, que a través de la vaporización del agua garantiza que no hay ninguna sustancia ajena en el resultado final.
Potasio: Es un tipo de metal alcalino. Es una de las sustancias inorgánicas que necesitamos para el correcto funcionamiento de nuestro organismo. Está involucrado en la contracción muscular, en la actividad neuromuscular y en el desarrollo celular, entre otras funciones.
Hierro: Es uno de los metales más abundantes en la corteza terrestre. Es utilizado por el ser humano para crear herramientas y otro tipo de objetos desde la prehistoria. Sin embargo, también es una sustancia que nuestro organismo necesita, aunque en proporciones tan pequeñas que ni siquiera son visibles.