Respuestas
Explicación:
Cuando intentas hacer todo por tu cuenta y con tus propias fuerzas das cabida a que el orgullo y la ansiedad se apoderen de ti. Es importante que reconozcas con humildad tu necesidad y dependencia de Dios, que aprendas a dejar tus ansiedades en sus brazos amorosos y que esperes a que intervenga en tu vida y en tus circunstancias. ¡Él es fiel, él obrará!
Besitos OvO
Respuesta:
What the Church believes of Christ finds its roots in Jesus' manner of believing in God. However, at the same time, the faith of the Church allows one to infer how the spiritual experience of Jesus came about. This reciprocal reference between Christ and the Church invites one to investigate the anthropological and theological tenets of the faith "of" Jesus, in the difficulties and possibilities that Jesus could have had in order to believe in his Father, given that he teaches us accordingly why and how to believe as well. In this way we discover that the Father, upon raising up Jesus, triumphs over the Mysterium iniquitatis and, against every suspicion of a possible indifference on the God's part in the face of human suffering, gives proof of being a God who deserves faith. The Father deserves faith, but he wouldn't if He did not also "believe" in humanity, just as He "believed" in his Son, Jesus. It is the love of the Father that, in the final analysis, brings about trust in Him and among people.
Key words: Faith
Explicación:
Israel en la medida que mueve a confiar y a obedecer a un Dios que merece ser creído. Aquello que hace las veces de fides quae, el concepto del Dios de la Antigua y de la Nueva Alianza, el Dios de la creación y de la historia, proviene de una experiencia de Dios mismo y sirve a nuevas experiencias suyas. La fides qua, la experiencia del amor, la liberación y perdón de Dios, constituye el único fin de la teología cristiana y el remedio exacto contra la esclerosis del cristianismo.
Por esta razón la fe de Jesús prepascual constituye el paradigma de la fe cristiana en estos dos aspectos, el subjetivo y el objetivo. Lo que la Iglesia cree de Cristo, el credo, hunde sus raíces en el modo que tuvo Jesús de creer en Dios (1). Habría sido un engaño que la Iglesia inventara su creencia. Pero sin la experiencia espiritual de la Iglesia salvaguardada en su credo, jamás nos habríamos enterado de la experiencia espiritual de Jesús. No habríamos conocido el camino que nos abrió ni la manera de recorrerlo. Entre la experiencia de Dios de Jesús y la experiencia de Cristo de la Iglesia, un mismo Espíritu establece la conexión y la compenetración vital que nutre a los cristianos contemporáneos. A lo largo de la historia de Israel, de la Iglesia y de la nuestra, ha debido prevalecer la vida espiritual que el Espíritu genera inmediatamente en cada creyente, pero que solo se hace inteligible para él mismo y para los demás en mediaciones culturales y religiosas que la encauzan (2).