Leer el siguiente texto:
Paulette Dieterlen Struck, investigadora del Instituto de Investigaciones Filosóficas de la UNAM nos dice: “Creo que una disciplina tan abstracta como la filosofía tiene que ser aplicada justamente a los problemas reales. Debería ayudarnos a ver el daño que nos está causando sustituir una idea muy fuerte como la de ciudadanía por una idea muy débil como la de consumidores. Asimismo, podría mostrarnos que el hecho de permanecer encerrados en casa no obedece a una actitud egoísta, ni mucho menos, sino a una actitud solidaria con los otros. Si yo estoy aquí, en casa, cuidándome, es porque también tengo la intención de cuidar a las demás personas. No olvidemos que sólo juntos podremos vencer esta pandemia.” La difícil situación por la que estamos atravesando nos ha puesto a prueba como especie. Con todo, la filósofa universitaria es optimista: espera que, al retomar nuestra vida normal, surga entre nosotros un sentido de la comunidad más fuerte, más sólido.
¿Qué papel tendría que jugar la filosofía en esta crisis sanitaria global?
¿Qué nos puede aportar para mejorar la realidad?
¿Hemos hecho algo mal los humanos para que la pandemia ocasionada por el coronavirus Covid-19 nos tenga en jaque a nivel mundial, o ésta es sólo y exclusivamente resultado de un proceso natural inevitable?
Respuestas
Respuesta:
1. El papel que tendría que jugar la filosofía en esta crisis es de reunificadora, pues nos hemos dado cuenta de que la única forma de enfrentar esta pandemia es con los otros. En el permanecer encerrado en casa, hay un trasfondo: cuidar a los demás y no solo a mí.
2. Para mejorar la realidad, lo que nos aporta la filosofía es una consciencia de la realidad y de sus problemas, los cuales nos ayudan a brindar soluciones y a buscar caminos para que en este mundo haya más paz, más justicia, más libertad, etc.
3. La falta de empatía hacia los demás nos ha hecho llegar hasta este punto, no solo hacia las personas si no hacia los animales, pues si reflexionáramos sobre las consecuencias de consumirlos adoptaríamos una nueva consciencia moral que nos permitiría llegar al bienestar de todos.