• Asignatura: Castellano
  • Autor: sharoncubides
  • hace 6 años

Análisis crítico de la fábula una asamblea en la carpintería

Respuestas

Respuesta dada por: sebastiangueto247
15

Respuesta:

Trata de una asamblea que realizaron las herramientas de una carpintería, con el fin de  arreglar sus diferencias. El primero en tomar la presidencia fue el martillo, sin embargo, la asamblea le notificó que debía renunciar debido a que hacía demasiado ruido y se pasaba el tiempo golpeando.  

El martillo estuvo de acuerdo con su retiro, pero pidió que el tornillo fuese expulsado. El tornillo a su vez, aceptó el retiro, siempre y cuando se expulsara a la lija. La lija aceptó, con la condición de que el metro también fuese expulsado. Todos hicieron hincapié en un aspecto negativo del otro para justificar su expulsión.

En ese momento entró el carpintero, se puso el delantal y comenzó su trabajo, utilizando a cada una de las herramientas que se habían visto envueltas en el inconveniente. Al finalizar, el carpintero había transformado un trozo de madera en un lindo mueble, con la ayuda de sus herramientas.

Cuando el señor se retiró, la asamblea volvió a deliberar y el serrucho expresó que todos tenían defectos, pero que el carpintero trabajaba con sus cualidades, lo cual los hacía valioso; por lo cual ya no se debían enfocar en sus flaquezas sino en sus virtudes. En ese momento todos comenzaron a resaltar las fortalezas de cada una de las herramientas y sus diferencias pasaron a un segundo plano.

«Cuando el personal de un equipo de trabajo suele buscar defectos en los demás, la situación se vuelve tensa y negativa. En cambio, al tratar con sinceridad de percibir los puntos fuertes de los demás, florecen los mejores logros . Es fácil encontrar defectos —cualquier necio puede hacerlo—, pero encontrar cualidades es una labor para los espíritus superiores que son capaces de inspirar el éxito de los demás».

Explicación:

Respuesta dada por: ricojuan792
4

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Trata de una asamblea que realizaron las herramientas de una carpintería, con el fin de  arreglar sus diferencias. El primero en tomar la presidencia fue el martillo, sin embargo, la asamblea le notificó que debía renunciar debido a que hacía demasiado ruido y se pasaba el tiempo golpeando.  

El martillo estuvo de acuerdo con su retiro, pero pidió que el tornillo fuese expulsado. El tornillo a su vez, aceptó el retiro, siempre y cuando se expulsara a la lija. La lija aceptó, con la condición de que el metro también fuese expulsado. Todos hicieron hincapié en un aspecto negativo del otro para justificar su expulsión.

En ese momento entró el carpintero, se puso el delantal y comenzó su trabajo, utilizando a cada una de las herramientas que se habían visto envueltas en el inconveniente. Al finalizar, el carpintero había transformado un trozo de madera en un lindo mueble, con la ayuda de sus herramientas.

Cuando el señor se retiró, la asamblea volvió a deliberar y el serrucho expresó que todos tenían defectos, pero que el carpintero trabajaba con sus cualidades, lo cual los hacía valioso; por lo cual ya no se debían enfocar en sus flaquezas sino en sus virtudes. En ese momento todos comenzaron a resaltar las fortalezas de cada una de las herramientas y sus diferencias pasaron a un segundo plano.

«Cuando el personal de un equipo de trabajo suele buscar defectos en los demás, la situación se vuelve tensa y negativa. En cambio, al tratar con sinceridad de percibir los puntos fuertes de los demás, florecen los mejores logros . Es fácil encontrar defectos —cualquier necio puede hacerlo—, pero encontrar cualidades es una labor para los espíritus superiores que son capaces de inspirar el éxito de los demás».

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