Respuestas
Respuesta:
no
Explicación:
ppr que la energía daña el calentamiento global
Respuesta:
Espero ayudar
Explicación:
1. Hogares más sostenibles
El consumo energético que hacemos en nuestro hogar interviene en el avance del cambio climático. Por eso, una de las primeras cosas que podemos hacer es comprobar qué clase de energía es la que estamos consumiendo en nuestra vivienda. El impacto del proceso de obtención de electricidad no es el mismo si procede de una planta de carbón, de una central nuclear, de paneles solares o de un parque eólico. Así pues, podemos comenzar por cambiar de compañía de luz y optar por contratar luz en una distribuidora que ofrezca electricidad que provenga de fuentes renovables como la energía solar.
2. Reducir el consumo
Aunque nos hayamos pasado a la energía verde, conviene hacer una revisión de los hábitos individuales y reducir el consumo habitual. No olvidemos que cuanto mayor sea el gasto energético mayor será la necesidad de recursos. Gestos como mantener una temperatura razonable en invierno, pueden notarse mucho en el consumo y en la factura de la luz o gas. Lo recomendable es poner el termostato en torno a los 20ºC y abrigarse con una chaqueta o un jersey para estar por casa. Otros hábitos que hay que revisar es el tiempo que se invierte en la ducha o mantener apagadas las luces cuando no se están usando.
3. Cambiar la iluminación
La iluminación LED es una alternativa muy interesante. Hace un tiempo la recomendación era utilizar bombillas de bajo consumo, pero hoy día día la tecnología a evolucionado hacia la iluminación LED que es mucho más eficiente. También hay que tener en cuenta el gasto de los aparatos en stand by. Ese piloto que queda encendido cuando apagamos algún electrodoméstico parece insignificante pero hace que incremente el gasto eléctrico.
4. Mejores alimentos
En los últimos años se ha incentivado mucho el consumo de productos ecológicos. Sin embargo, para prevenir el cambio climático hay que fijarse en el lugar de procedencia. Elegir productos de cercanía contribuye a reducir la enorme contaminación que se produce en el transporte intercontinental. Por otra parte hay que tener en cuenta que producir alimentos de origen animal tiene un impacto diez veces mayor que la de vegetales. Según distintos informes, la ganadería es responsable del 60% de la emisiones de gases de efecto invernadero. Así pues, una dieta vegetariana es la única que puede devolver al planeta su antiguo esplendor.
5. Generar menos residuos y reciclar
El movimiento “Zero Waste” es cada vez más popular. Es una tendencia que pretende minimizar todo lo posible la huella ecológica y evitar generar basura. Solamente hay que modificar algunas costumbres como usar bolsas de tela, comprar frutas y verduras a granel, rechazar productos con envoltorios plásticos y optar siempre por materiales biodegradables.
Podemos hacer muchas pequeñas cosas para cuidar del planeta y hacerlo más sostenible. El ser humano está consumiendo una cantidad tan desproporcionada de recursos que a la Tierra no le está dando tiempo a regenerarse: está enferma y arrasada. Hemos de hacer algo ya para prevenir el cambio climático, apostemos por la sostenibilidad, es ahora o nunca
PONME CORONITA PLIS