Mt 5, 1 – 11. Responde la siguiente pregunta: ¿Qué mensaje nos deja el texto leído? ¿En qué consiste el verdadero sentido de la felicidad?
Respuestas
Respuesta:
El Sermón del monte empieza con las bienaventuranzas —ocho declaraciones que comienzan con la palabra bienaventurados.[1]Esta palabra declara un estado de bendición que ya existe. Cada bienaventuranza declara que un grupo de personas que por lo general son considerados como afligidos, en realidad son bendecidos. Los bendecidos no tienen que hacer nada para obtener esta bendición, Jesús simplemente declara que ellos ya han sido bendecidos. Por tanto, las bienaventuranzas son primero que todo declaraciones de la gracia de Dios, no son condiciones de la salvación o planes de acción para ganarse la entrada al reino de Dios.
Los que pertenecen a los grupos de bienaventurados experimentan la gracia de Dios, ya que el reino de los cielos se ha acercado. Observe la segunda bienaventuranza, “Bienaventurados los que lloran” (Mt 5:4). Por lo general, las personas no creen que llorar sea una bendición. Es algo doloroso. Sin embargo, con la venida del reino de los cielos, el llanto se convierte en una bendición, porque los que lloran “serán consolados”. La implicación es que Dios mismo será quien los consuele. La aflicción del llanto se convierte en la bendición de una relación profunda con Dios. ¡Esa en realidad es una gran bendición!