Respuestas
Respuesta:
La brecha entre la ley y la realidad es cada vez más grande. La gobernabilidad se debate entre ser estrictos con las normas o tolerar ciertas prácticas ilegales.
Explicación:
Las normas que no se cumplen son más importantes de lo que parecen. Más que una falla, un defecto o un esfuerzo inútil, esas normas incumplidas son esenciales para mantener la estabilidad de las sociedades en las que vivimos. Digo esto basado en mi experiencia como ciudadano de Colombia, un país en donde la estabilidad institucional, la tradición jurídica, el fervor por el derecho y el respeto de los procedimientos judiciales conviven, casi sin traumatismo, con el conflicto armado, la violencia y la corrupción, entre otras manifestaciones de la degradación política y social.
Pero mi experiencia no es única. Gran parte de Latinoamérica vive esa brecha existente entre las normas y los hechos, sin que ello afecte la estabilidad del país, lo cual, por lo demás, no tiene nada de nuevo en la historia de nuestro continente. Más aún, la brecha entre lo que se proclama como norma y lo que se hace en la práctica es cada vez más frecuente en el mundo globalizado y desordenado que habitamos.