¿Cómo llegó el sistema monetario a Colombia?


ddelgado: ayudaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa
kaiquen: La historia del dinero en Colombia comienza con la colonización española, cuando se comenzó a introducir en América Latina. ... Posteriormente, en 1847, un peso colombiano equivaldría a 10 reales. En 1870 se creó el Banco de Bogotá, la primera institución bancaria privada de Colombia.

Respuestas

Respuesta dada por: LolaReinlods
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Explicación paso a paso:

En 1871 Colombia formó parte del patrón oro, un sistema monetario que establece el valor de una moneda en función del valor del oro para ese momento. ... En 1915 ocurrió un cambio en el cono monetario, introduciendo una nueva moneda conocida como “Peso Oro”, equivalente a 100 pesos antiguos.

Besitos OvO

Respuesta dada por: gordogrosero704
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L

El régimen de la libre estipulación fue restablecido por la ley 18 de1904. Poco tiempo después, la ley 19 de 1905, sobre asuntos fiscales y monetarios, decretó la conversión del papel moneda por oro al cambio del diez mil por ciento.

Sobre la experiencia de este tremendo fracaso y al amparo de la paz interna pudo el país edificar un sistema monetario sano, que ha sido factor esencial del progreso que en todas las actividades públicas y privadas se registra en los últimos cuarenta años.

BANCOS DE EMISIÓN

La creación de un establecimiento de crédito, que prestará los servicios de un Banco Central, fue prevista en Colombia por los constituyentes de 1821.

En efecto, el artículo 55 de la Carta Fundamental de aquel año, señala entre las atribuciones del Congreso la de "organizar un Banco Nacional ".

Sin embargo, solamente el 1º de enero de 1881, en virtud de las disposiciones de la ley 39 del año anterior, pudo fundarse el Banco Nacional, cuya vida coincide con uno de los periodos más agitados de la historia de la República.

El Banco debía tener un capital de $2.500.000,00, así:$2.000.000,00 que en especies metálicas suministraría el Tesoro público, y $500.000,00 representados en acciones que se ofrecerían libremente a los particulares; estaba autorizado para celebrar los negocios ordinarios de descuento, emisión, giro y depósito, y para ocuparse en las operaciones de Tesorería congruentes con sus funciones, que señalara el Gobierno.

La ley declaró que la emisión de billetes sería privilegio exclusivo del Banco Nacional, pero que el Poder Ejecutivo permitiría dicha emisión a los bancos privados establecidos con anterioridad y a los que se organizaran en el futuro, siempre que unos y otros adquirieran el compromiso incondicional de aceptar como dinero efectivo los billetes del Banco oficial. Esta facultad de emitir se suspendió a las instituciones particulares por la ley 57 de 1887.

El Banco funcionó exclusivamente con los recursos del Tesoro, pues no fue posible obtener la participación del capital privado, que hubiera sido benéfica, desde todo punto de vista, para el desarrollo de sus actividades.

Las revoluciones internas minaron por su base este organismo, que vino a ser el objetivo primordial de grandes debates políticos, y cuya liquidación fue decretada, como atrás se dijo, por la ley 70 de 1894.

Serenadas las pasiones de la época, el observador imparcial no puede hoy menos de reconocer la rectitud que presidió el manejo del primer Banco Central colombiano. Recientemente venció el último plazo para el cambio de los billetes emitidos por el Banco Nacional, y el saldo pendiente por convertir de la apropiación calculada desde el comienzo de la liquidación, que ascendía a una suma apreciable, ingresó a las arcas del Tesoro. En esta forma ha quedado desvirtuada la creencia popular en cuantiosas emisiones clandestinas de billetes, verificadas por los gestores de aquella desafortunada empresa oficial.

Resultado inevitable de las guerras civiles de fines del siglo pasado fue la desvalorización de la moneda colombiana, hecho que hubo de reconocer la ley 19 de 1905, ya citada, al ordenar la conversión del papel moneda por oro, en la proporción de ciento por uno.

Por el Decreto legislativo 47 de 1905 se autorizó la fundación del Banco Central de Colombia y se le concedió el derecho exclusivo de emitir billetes por un periodo de treinta años. Esta institución se convirtió, poco tiempo después de la transformación política de 1910, en un organismo de carácter netamente privado, sin privilegio alguno del Estado.

Posteriormente se sometieron al estudio del parlamento varias iniciativas tendientes a la organización de un banco emisor, ninguna de las cuales pudo llevarse a la práctica.

La misión de consejeros financieros norteamericanos, que presidió el profesor Edwin Walter Kemmerer, de la Universidad de Princeton, elaboró un proyecto para la creación de un banco central, que aceptado por el Congreso con algunas modificaciones, se consagró en la ley 25 de 1923, orgánica del actual Banco de la República.

LA LEY MONETARIA BÁSICA

El artículo 1º de la ley 167 de 1938 establece que "la unidad monetaria y moneda de cuenta nacional es peso oro, que pesa cincuenta y seis mil cuatrocientos veinticuatro cienmilésimos de gramo (56.424) de oro a la ley de novecientos milésimos de fino (0,900)".

Con anterioridad a esta disposición regía desde el año de 1912 el artículo 127 del Código Fiscal, que señalaba el contenido de oro de la unidad monetaria en "un gramo quinientos noventa y siete milésimos de gramo, y seis décimos de milésimo de gramo, a la ley de novecientos dieciséis milésimos y setenta y seis centésimos de milésimo de fino".

Las dos leyes citadas consagran la división del peso en cien centavos.

L

La equivalencia del nuevo peso colombiano y el actual dólar Roosevelt de los Estados Unidos, cuyo contenido es de 15,5/21 gramos de oro a la ley de 0,900, se demuestran con las siguientes cifras:

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