Respuestas
Respuesta:
En ocasiones usted ha leído un texto y tiene la impresión de que parece más una lluvia de
ideas que un texto bien desarrollado, y parte del problema es que este texto puede no
tener un hilo conductor. El hilo conductor le da sentido y cohesión a un discurso o texto a
nivel global, por lo que lo ideal es revisarlo cuando ya se tenga una primera versión del
texto. Un buen hilo conductor requiere una buena estructura de texto como base, y se
recomienda revisar el recurso de “Planeación de textos” como paso previo.
El objetivo del hilo conductor, como su nombre lo indica, es asegurar conexiones
fluidas entre las distintas secciones del texto. Un buen hilo conductor es como un
marinero que puede estar navegando un mar complicado pero logra anticipar los cambios
de velocidad y dirección y hacerlos de manera suave. Por otro lado, un texto sin buen hilo
conductor es como un conductor de bus que no sabe para dónde va, cambia de carril y
frena sin aviso de manera brusca. Estos cambios bruscos dificultan que el lector mantenga
su atención.
Finalmente el hilo conductor es un elemento transversal para mantener la cohesión
de su texto, que empieza a tenerse en cuenta desde la planeación misma del texto hasta
la revisión final del mismo. Dado que el hilo conductor asegura la coherencia y fluidez a
nivel global, es más fácil empezar teniendo los siguientes insumos: para la coherencia, un
plan de texto; y para la fluidez, un primer borrador con la introducción, desarrollo y
conclusiones.