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Respuesta:
La percepción y definición de la cultura en su relación con la naturaleza es una cuestión relativa en todo nivel humano y requiere un contexto específico para lograr tener una idea clara. Quizá la forma más fácil de entrar al tema sea a través de la antropología.
Desde los inicios del hombre, fue ineludible el contacto entre los individuos de esta especie. Esta relación definió por completo los comportamientos y la infinidad de características propias de la humanidad. El producto de esto es lo que llamamos comúnmente como cultura.
La cultura es el distintivo esencial de la humanidad respecto al mundo puramente natural e instintivo, aunque es aún discutible si es su único objetivo. Las concepciones de este proceso han cambiado con el tiempo y han cuestionado variadas veces su relación con la naturaleza. En el siglo XVII, la noción de la cultura en la ilustración europea preconcebía a la naturaleza como “inculta”, es decir, mientras menos civilización tenían los pueblos, menor era el nivel de su cultura. Al mismo tiempo, la tradición romántica de Rousseau afirma el fuerte lazo que une a la cultura con la naturaleza, pues es una característica universal e inherente que tiene todo individuo y ninguna es superior a otra. En esta ultima postura, se abarca de mejor manera las características que definen a la cultura, como los rasgos, las tradiciones y los comportamientos humanos propios de cada grupo humano.
En la modernidad, la cultura se muestra en un concepto más amplio y muy ligado al contexto del hombre en la naturaleza, pero se plantea un complemento crucial en su objetivo y es quizá la teoría más acertada hasta el momento. Hoy el fin principal de la cultura es lograr diferenciar lo verdaderamente humano con los comportamientos más instintivos y animales. La cultura se muestra como la potencia principal de la racionalización humana, como base estructuras sociales y de las identidades humanas, las cuales están siempre en constante cambio.
Personalmente, considero a la cultura como proceso fundamental del razonamiento humano; como un factor esencial, junto con el instinto natural de cada individuo, de la configuración de nuestra realidad social y estructural. Hoy en día hemos comprendido la estrecha relación cultura-naturaleza y es casi imposible concebir el comportamiento humano sin mencionar estos conceptos. Por más que se intente, la cultura no se puede independizar de la naturaleza humana, puesto que esta última es su base y finalidad. Su principal objetivo es configurar los progresos, las estructuras y las nociones de realidad de cada grupo y sus miembros.
Respuesta:
es pero que te sirva
Explicación:
La percepción y definición de la cultura en su relación con la naturaleza es una cuestión relativa en todo nivel humano y requiere un contexto específico para lograr tener una idea clara. Quizá la forma más fácil de entrar al tema sea a través de la antropología.
Desde los inicios del hombre, fue ineludible el contacto entre los individuos de esta especie. Esta relación definió por completo los comportamientos y la infinidad de características propias de la humanidad. El producto de esto es lo que llamamos comúnmente como cultura.
La cultura es el distintivo esencial de la humanidad respecto al mundo puramente natural e instintivo, aunque es aún discutible si es su único objetivo. Las concepciones de este proceso han cambiado con el tiempo y han cuestionado variadas veces su relación con la naturaleza. En el siglo XVII, la noción de la cultura en la ilustración europea preconcebía a la naturaleza como “inculta”, es decir, mientras menos civilización tenían los pueblos, menor era el nivel de su cultura. Al mismo tiempo, la tradición romántica de Rousseau afirma el fuerte lazo que une a la cultura con la naturaleza, pues es una característica universal e inherente que tiene todo individuo y ninguna es superior a otra. En esta ultima postura, se abarca de mejor manera las características que definen a la cultura, como los rasgos, las tradiciones y los comportamientos humanos propios de cada grupo humano.
En la modernidad, la cultura se muestra en un concepto más amplio y muy ligado al contexto del hombre en la naturaleza, pero se plantea un complemento crucial en su objetivo y es quizá la teoría más acertada hasta el momento. Hoy el fin principal de la cultura es lograr diferenciar lo verdaderamente humano con los comportamientos más instintivos y animales. La cultura se muestra como la potencia principal de la racionalización humana, como base estructuras sociales y de las identidades humanas, las cuales están siempre en constante cambio.
Personalmente, considero a la cultura como proceso fundamental del razonamiento humano; como un factor esencial, junto con el instinto natural de cada individuo, de la configuración de nuestra realidad social y estructural. Hoy en día hemos comprendido la estrecha relación cultura-naturaleza y es casi imposible concebir el comportamiento humano sin mencionar estos conceptos. Por más que se intente, la cultura no se puede independizar de la naturaleza humana, puesto que esta última es su base y finalidad. Su principal objetivo es configurar los progresos, las estructuras y las nociones de realidad de cada grupo y sus miembros.