Respuestas
Respuesta:
De cara a las próximas elecciones generales, Ecologistas en Acción ha presentado a los diferentes partidos políticos 30 propuestas en relación a la gestión del agua.
Se avanza hacia una situación de colapso hídrico que hace urgente un giro hacia una gestión más ambiental y social del uso del agua en España.
El abandono de la construcción de nuevos grandes embalses y trasvases, así como el freno al establecimiento de nuevos regadíos y la reducción de la superficie actualmente regada, son algunas de las medidas planteadas.
El aumento del consumo de agua que se está produciendo en España en los últimos años está generando una situación de carencia permanente de este recurso. El crecimiento del regadío unido a la reducción de los recursos hídricos disponibles a causa del cambio climático son las principales razones. Esta situación está conduciendo hacia un colapso hídrico, que se produciría muy posiblemente cuando llegue la próxima sequía.
Para evitarlo, Ecologistas en Acción considera necesario que se produzca un cambio importante en lo que ha sido la gestión del agua en España durante las últimas décadas. Por ello, la organización ecologista ha elaborado 30 propuestas en relación a la gestión del agua, con el fin de que sean asumidas por las formaciones políticas que se presentan a estas próximas elecciones y las pongan en práctica en los próximos años.
Entre estas propuestas se encuentran el abandono de la construcción de nuevos grandes embalses y trasvases, el freno al establecimiento de nuevos regadíos y la reducción de la superficie actualmente regada. También la fijación de caudales ambientales adecuados en todas las masas de agua, la consideración del abastecimiento a poblaciones y el saneamiento como un derecho humano para todas las personas, así como su gestión pública con control ciudadano. La lista continúa hasta las 30 propuestas que supondrían un giro hacia una gestión más ambiental y social del uso del agua en España.
Explicación:
Respuesta:
. La protección, uso o aprovechamiento y recuperación del agua se basará en los
principios siguientes:
Bien vital, finito y vulnerable: El agua es un bien singular, esencial para la vida
humana y de los ecosistemas, finito y vulnerable, que por su interrelación con
todas las actividades humanas los aspectos políticos, económico, social, cultural
y ambiental, se convierte en un recurso vital.
Participación: Es un proceso en el que exige libertad para pensar, expresar, actuar,
estableciendo una relación entre la persona y el entorno donde todos los grupos
sociales puedan adquirir poder para acceder a recursos y controlar su propia vida y
expresar y defender con ellos sus necesidades e intereses.
Pleno acceso: Todas las personas habitantes del país, sin distinción de nacionalidad,
origen étnico, sexo, género, estrato social, edad o religión, tienen derecho al
pleno acceso al agua, en cantidad y calidad adecuada para su vida digna. Los
usos prioritarios del agua serán los destinados a satisfacer las necesidades
humanas fundamentales; y luego, la de todas las especies vivas y ecosistemas del
país.
Bien público: Todas las aguas con independencia de su ubicación y estado físico
constituyen patrimonio nacional.
Primacía de Intereses: En la protección, conservación, recuperación y el
aprovechamiento del agua, prevalecerá siempre el interés colectivo, social y
publico sobre el interés particular.
Sustentabilidad: La satisfacción equitativa de las necesidades actuales de agua de
toda la población, manteniendo la vitalidad de los ecosistemas, debe implicar su
conservación y su calidad, para beneficio de las generaciones futuras.
Integralidad: La gestión del agua exige un enfoque integral que vincule el
mejoramiento de la calidad de vida de la población con la protección de los
ecosistemas naturales, con inclusión de sus vínculos con el territorio y la
diversidad biológica, ya sea de las cuencas o los acuíferos.
Enfoque de cuenca: El agua es un recurso natural que se renueva a través del ciclo
hidrológico. La cuenca hidrográfica constituye la unidad territorial de gestión de
las aguas y es eje de integración de la política de ordenamiento ambiental del
territorio.
Participación ciudadana: La gestión sustentable e integral de las aguas requiere la
participación equitativa y el compromiso responsable de toda la población.
Gestión ecológica de riesgos: La gestión del agua debe incluir la prevención de los
riesgos hidro-meteorológicos que amenacen a la población, sus bienes y a los
ecosistemas, y la mitigación de los efectos perjudiciales que pueden provocar.
Descentralización: La gestión del agua requiere de una coordinación integral,
coherente, descentralizada de los diversos niveles político administrativos
territoriales de gobierno, sus usuarios y usuarias y las comunidades.
Valoración social y económica: El agua es un recurso cuya valoración económica
debe supeditarse a los beneficios sociales, culturales y ambientales que de su uso
y aprovechamiento se deriven.
Explicación: