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Mucho antes que los españoles llegaran a estas comarcas, mucho antes que llegaran a cambiar los destinos de estos pueblos soberanos, a una legua de distancia de Nicoya, la vetusta capital de la Gran Nación Chorotega, vivía Curime, un joven guerrero hijo de un Señor Principal, súbdito de la comarca chorotega. Este apuesto varón de cuerpo broncíneo y de fuerte contextura, estaba locamente enamorado de la princesa Nosara, la bella hija del Cacique Nicoa, aristócrata Supremo Señor de la Gran Nación Chorotega.
Habitaba Curime en un poblado rodeado de cultivos de maíz, frijoles, algodón, camote, yuca, pipián, ayote, frutales, cacao, nísperos y zapotes. Además de cultivar la tierra, era diestro cazador. Conocía muy bien la crianza del perro mudo, una animal místico que era utilizado solo en grandes los banquetes de las suntuosas ceremonias religiosas. Este raro animal no ladraba, no tenía pelos y los otros animales por nada del mundo nunca comían su extraña carne.
Era el joven Curime un joven destacado en el juego de pelota, por lo que siempre descollaba en las justas deportivas que se llevaban a cabo en la plaza de Nicoya, principalmente con motivo de la Fiesta del Sol y la Fiesta del Maíz. La plaza de Nicoya era un sitio donde también se realizaban los grandes mercados de los chorotegas llamado tiangües. Allí se reunía el pueblo a comprar y vender con semillas de cacao y níspero, granos, hortalizas, cueros, preciosas cerámicas policromadas, finas telas y tilmas, lindas diademas, vistosos penachos así como bellas artesanías en barro, oro, piedra y jade.
Era Nosara una linda muchacha de cuerpo esbelto y delicado. Su rostro era bello y de finos rasgos adornado con unos ojos verde almendrados. Lindo era su pelo negro azabache y su piel tersa con el color de la miel silvestre. Su espíritu era noble y cristalino como las nacientes fresquecitas, su alma era dulcita como los jicotes y blanquita como las flores albas del madroño.
Explicación: :) recibir respuestas de temas de CR es dificil una vez pregunte pero nadie respondio