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JOJO REFERENCE , ._. XD
Respuesta:
si
A raíz de los tristes hechos presentados en días recientes, es importante preguntarnos por qué se repite una y otra vez la misma situación: una mujer es asesinada por su pareja o ex pareja, tras una historia previa de violencia, sin que nada ni nadie logre evitar o al menos, parar, las agresiones a tiempo. Al parecer, autoridades y personas del común, solo reaccionamos cuando llegamos al extremo, al grado mayor de violencia letal e irreversible: el que cobra vidas.
Explicación:
si
Pese a los avances legislativos, cuando las mujeres acuden a pedir protección por episodios de violencia, no encuentran ayuda oportunamente. Esto refleja que los funcionarios y funcionarias son también colombianos que comparten la idea de que esto no es grave. Así que e claro que este no es un problema de penas, más leyes, o castigos más duros. Es un problema de romper la indiferencia y comprender que cada uno de nosotros pierde y es responsable de cada nueva víctima sin importar su origen, posición o sector de residencia. La vida es sagrada, y antes esto no hay matices ni «fueques que valgan».
Los ciudadanos no nos alertamos con las escenas cotidianas de celos, ni con las «pequeñas grandes» acciones de control… de dónde vienes, para dónde vas, por qué te vistes así, no hables con ese tipo, vamos a ver qué es lo que esconde ese celular… así empieza la violencia que puede terminar en tragedia, pero no le paramos bolas a tiempo, en parte, porque se supone que es por amor, y en nuestra cultura se comparte erróneamente la idea de que «para amar hay que sufrir».
Lo más peligroso es que no somos contundentes en el rechazo social de esta forma de violencia: según la encuesta de cultura ciudadana adelantada por Corpovisionarios, aún el 17% de los habitantes de las principales ciudades del país prefiere no hacer nada cuando se da cuenta que el vecino está golpeando a la esposa. Con este nivel de indiferencia no es de extrañar que las mujeres en Colombia mueran más a manos de sus parejas que a manos de delincuentes o actores armados. Por que es un hecho de que la mayoría de los muertos en Colombia conocen a sus verdugos, y en muchos casos son personas que querían o en las que confiaban.
Evitar estas muertes es responsabilidad de todos y de todas: rechazo absoluto, alertas tempranas e intervención oportuna de las autoridades. Cada cual debe poner su grano de arena. Cada vida es sagrada, cada muerte es un pérdida irreparable para cada uno y para todos.