María tiene cáncer a los huesos en fase tempana. Al ser diagnosticada fue sometida a quimioterapias para tratar de destruir las células cancerígenas. Al mismo tiempo María se somete a una serie de tratamientos basados en la infusión de aguas naturales y hierbas.
¿Qué tipos de medicina se encuentran en el caso?
Respuestas
Quimioterapia
La quimioterapia (quimio) usa medicamentos que se inyectan en una vena o se administran por la boca para eliminar las células cancerosas. Estos medicamentos entran en el torrente sanguíneo y pasan por todo el cuerpo. La quimioterapia se usa como tratamiento principal para muchos tipos de cáncer metastásicos. A menudo, la quimioterapia puede reducir el tamaño de los tumores. Esto puede aliviar el dolor y ayudarle a sentirse mejor, aunque no causa que los tumores desaparezcan ni evita que regresen.
Terapia hormonal
Los medicamentos de terapia hormonal bloquean las acciones de ciertas hormonas o reducen la producción de éstas. Con más frecuencia, esta terapia se emplea para tratar el cáncer de seno y de próstata, y también se puede usar cuando estos cánceres se han propagando a los huesos.
Por ejemplo, el estrógeno es una hormona que causa el crecimiento de muchos cánceres de seno. Algunos medicamentos pueden reducir los niveles de estrógeno o bloquear el efecto del estrógeno en las células del cáncer de seno. Cuando el cáncer de seno se ha propagado a los huesos, esto podría detener el crecimiento de las células e incluso hacer que los tumores se reduzcan de tamaño.
De la misma manera, las hormonas sexuales masculinas (llamadas andrógenos) causan el crecimiento de la mayoría de los cánceres de próstata. Los medicamentos que reducen los niveles de andrógenos o que bloquean su efecto pueden ayudar a detener o a disminuir el crecimiento de estos cánceres.
Terapia dirigida
Los medicamentos de terapia dirigida atacan partes específicas de las células cancerosas u otras células o proteínas que contribuyen a que las células cancerosas crezcan. Estos medicamentos funcionan de distinta manera que los medicamentos de la quimioterapia convencional. Se pueden usar solos o en combinación con otros tratamientos para las metástasis óseas.
Inmunoterapia
La inmunoterapia es una terapia sistémica que estimula el sistema inmunitario del cuerpo o usa versiones sintéticas de proteínas del sistema inmunitario para eliminar las células cancerosas. La inmunoterapia se puede usar para tratar las metástasis en los huesos.
Para saber si la inmunoterapia se emplea para tratar su cáncer, lea nuestra información sobre ese tipo de cáncer.
Radiofármacos
Los radiofármacos son un grupo de medicamentos que poseen elementos radiactivos. Estos medicamentos se inyectan en una vena y se asientan en áreas de hueso con recambio (metabolismo) activo (como las que contienen propagación del cáncer). Una vez allí, la radiación que emiten elimina a las células cancerosas.
Si el cáncer se ha extendido a numerosos huesos, los radiofármacos funcionan mejor que tratar de dirigir la radiación externa a cada hueso afectado. (La radiación externa se aborda más adelante como tratamiento local). En algunos casos, se pueden usar los radiofármacos con la radiación de rayos externos dirigida a las metástasis óseas más dolorosas.
Algunos de los radiofármacos aprobados para ser usados en los Estados Unidos
Estos medicamentos funcionan mejor cuando se trata de metástasis blásticas, lo que significa que el cáncer ha estimulado ciertas células del hueso (osteoblastos) para formar nuevas áreas de hueso.
Vea Radioterapia para aprender más sobre este tipo de tratamiento.
Otros medicamentos para metástasis en los huesos
Bifosfonatos
Los bifosfonatos son un grupo de medicamentos que se pueden usar para tratar el cáncer que se ha propagado a los huesos. Estos medicamentos funcionan al desacelerar la acción de los osteoclastos. Estas células óseas normalmente disuelven pequeños fragmentos de los huesos para ayudar a remodelarlos y mantenerlos fuertes. Pero los osteoclastos a menudo son muy activos cuando el cáncer se propaga a los huesos, lo que puede causar problemas.
Los bifosfonatos pueden ser útiles para el cáncer que se ha propagado a los huesos, ya que:
Reducen el dolor de huesos
Retardan el daño óseo causado por el cáncer
Reducen los altos niveles de calcio en la sangre (hipercalcemia)
Reducen el riesgo de fracturas
Los bifosfonatos tienden a funcionar mejor cuando las radiografías muestran que el cáncer metastásico está adelgazando y debilitando el hueso (metástasis líticas). Estos medicamentos no son tan eficaces para el tratamiento de metástasis blásticas, donde los huesos se vuelven más densos.
Los efectos secundarios más comunes de los bifosfonatos son cansancio, fiebre, náusea, vómito, anemia (bajo nivel de glóbulos rojos) y dolor en los huesos o las articulaciones. Sin embargo, otros medicamentos o el cáncer por sí solo pueden causar muchos de estos efectos. Estos medicamentos pueden reducir los niveles de calcio.
Osteonecrosis de la mandíbula relacionada con la medicación
Un efecto secundario poco común, pero muy grave, consiste en osteonecrosis de la mandíbula. En esta afección, parte del hueso de la mandíbula pierde su suministro sanguíneo y muere.